jueves, 26 de enero de 2012

OTRA MIRADA AL AÑO DEL DRAGÓN : Una visita al Barrio Chino de Lima


La semana que paso se celebro la llegada del Año Nuevo Chino - dedicado esta vez al Dragón - y que mejor oportunidad para hacer una visita al tradicional barrio chino en Lima, con el objeto de conocer sus atractivos. Luego de cruzar su imponente arco se ingresa a ella. Las baldosas hexagonales que adornan el piso de la Calle Capón guardan historias de vidas. Cada una tiene inscripciones de nombres, frases, agradecimientos y saludos de cumpleaños. Y sobretodo, de esperanza, como la que vive y siente la colonia china en el Perú desde hace décadas. Así fue desde sus inicios, cuando miles de inmigrantes chinos - procedentes en su mayoría de Canton, así como de Hong Kong y Macao - decidieron crear un barrio característico como existe en otras ciudades del mundo. Es por ello que eligieron la Calle Capón, en Barrios Altos (ubicado en las inmediaciones del Mercado Central) en la cual empezaron a surgir sus prósperos negocios. En 1971, la Embajada China en el Perú regaló el actual Arco que resguarda la entrada del barrio, simbolizando de esa manera la presencia china en el Perú. Tiene unos ocho metros de altura por trece de ancho. Está enchapado en madera y lleva unas inscripciones que dan la bienvenida tanto en chino como en español a todos aquellos que lo cruzan, que a la letra dice: “El bienestar alcance a todos los que viven bajo este signo”. De esta manera los chinos marcaron su presencia en esta ciudad.Lamentablemente el desinterés de las autoridades municipales propició que el caos del comercio ambulativo hiciera de las suyas en aquel lugar, convirtiéndolo en un sitio deprimente y peligroso. El cambio recién vino en 1999 cuando el por entonces alcalde Alberto Andrade inicio la recuperación de este tradicional barrio. Una de las celebraciones más espectaculares ocurre precisamente cuando se celebra el Año Nuevo Chino, en el cual sacan a pasear al famoso Dragón, acompañado de bailarines y fuegos artificiales. Aunque hoy no tiene circuitos turísticos implementados, no es mala idea darse una vuelta por el Barrio Chino. Basta un recorrido corto para percatarse de que la gastronomía y las tiendas de diferentes artículos decoran ambos lados de la Calle Capón. Es un emporio donde el comercio de los inmigrantes chinos se ha transformado en bodegas, salas de juego y bancos, así como de modernos restaurantes orientales - denominados “Chifas”- que han fusionado con maestría la comida china con los ingredientes locales. Como una curiosidad, también puedes hacer una visita al templo chino - ubicado en la cuadra 9 del jirón Huanta - donde se lee el futuro, o adquirir un Dragón (que atrae de la buena suerte) en las tiendas especializadas que existen en la zona. Como ven, estas costumbres orientales han arraigado tanto en el país, que permiten entender cómo el Perú asimiló la cultura china tras 163 años :)