domingo, 2 de junio de 2013
UNA ENFERMIZA OBSESION: Rospigliosi y sus delirios de persecución
La semana que paso hemos sido testigos de las disparatadas afirmaciones de un impresentable sujeto - engreído de la prensa basura y asiduo visitante de la embajada estadounidense, quien debido a su incapacidad manifiesta en el cargo fue censurado por el Congreso cuando fue ministro del Interior – en el sentido de que el gobierno “estaría realizando un seguimiento a periodistas y políticos de oposición mediante la interceptación telefónica” como en los tiempos de la dictadura fujimorista. Lo hilarante de todo es que no ha presentado prueba alguna de ello, dando a entender que se trata de chismes y rumores malintencionados sin fundamento alguno, propaladas por aquellos sectores de la mafia criminal aprofujimorista que fueron expulsados del poder y que añoran volver a el para seguir haciendo de las suyas a costa del Estado mediante los “faenones” y el saqueo generalizado de las Arcas Públicas tal como ocurrió en el pasado y del cual abundan pruebas de ello. En este caso, ¿alguien ha visto un documento o un video que valide sus afiebradas afirmaciones? yo tampoco, y es que simplemente no existen, porque todo forma parte de esa vil campaña de calumnias difamatorias lanzadas a través de la prensa basura en su afán de desprestigiar la labor del gobierno del señor Humala. Ya lo dijo el ministro de Defensa Pedro Cateriano, quien salio al frente para responder a este rufián, calificándolo acertadamente de ser un conspicuo enemigo del gobierno y estar al servicio de oscuros intereses. Y razón no le falta, porque son conocidas sus continuas visitas a la embajada estadounidense para recibir instrucciones. ¿Quien se iba a imaginar que alguien que se inicio políticamente como trostkista terminaría en asalariado de Washington?. Al respecto Cesar Hildebrandt escribió un interesante articulo sobre este nefasto personaje, que hoy cobra palpitante actualidad, el cual me permito transcribir unas líneas entrecomillado porque quien mejor que el para describirlo tal cual es: “No hay nada más peligroso que alguien que se muda al otro extremo. No conozco a un solo converso político que haya terminado en el centro y aceptado la mesura o suscrito un cierto escepticismo. Todos marchan a las antípodas con el paso marcial de quienes, por fin, han descubierto "la verdad". Y hablan como pontífices sobre su nueva fe. Es lógico: para matar el pasado, para no recordar qué fueron ni qué tuvieron que abandonar, se necesita la máxima severidad. Se diría que un extremismo sólo se olvida adoptando otro. Y ese es el caso del señor Rospigliosi. Quienes lo recuerdan en Andahuaylas - como dirigente de Vanguardia Revolucionaria - adoctrinando a campesinos desde el púlpito de un comunismo dispuesto a tomar las armas, no pueden creer que hoy sea un empleado de la embajada de los Estados Unidos. Porque lo más grave de todo no es que Rospigliosi haya solicitado a los gringos que hicieran algo para evitar que Humala llegase al poder en las pasadas elecciones. Lo más grave es habernos enterado, por fin, oficialmente, que el señor Rospigliosi tiene una empresa que surte servicios rentados a la embajada de los Estados Unidos. Su ingreso en la planilla de los estadounidenses compromete seriamente su papel de columnista “independiente” que pretende ser. Rospigliosi estuvo en Vanguardia Revolucionaria, preparando la revolución bolchevique que haría que millones de peruanos fueran tratados como Stalin trató a los desafectos. Sin embargo, Rospigliosi abandonó todo esto en busca de fortuna y cambió de traje, de norte, de aire, de piel y de lenguaje. Y un día apareció en Caretas, un sucio pasquín servil al fujimorismo y allí se sintió como en familia y hoy hace de las suyas en La República, cuyo actual propietario es indigno del padre que tuvo, al aceptar a este individuo como columnista, en el cual repite sus mentiras fabricadas en la embajada estadounidense, sirviendo a sus nuevos amos a los cuales antes combatió”.No hace falta agregar más, porque su pasado lo condena (Al momento de escribir esta nota, me entero de la decisión del derrotado candidato de la derecha venezolana y agente de la CIA, el judío Henrique Capriles de cancelar su visita a Lima, debido a que el Presidente Ollanta Humala no iba a recibirlo por ningún motivo, y como este era su único objetivo decidió no venir, dejando en ridículo a la derecha de este país que lo defiende con fervor y preparaba un gran recibimiento. Me pregunto ¿cuando dejarán de ser una panda de perdedores?) :)