sábado, 16 de enero de 2016
CESAR HILDEBRANDT: El “nuevo” fujimorismo
Agudo y crítico como siempre, el reconocido periodista César Hildebrandt fue entrevistado esta semana por Ideele radio, en el cual con la franqueza que lo caracteriza, desenmascara a esa banda delincuencial que pretende volver a Palacio en el 2016 de la mano de la hija de un despreciable genocida - condenado en un proceso ejemplar a 25 años de prisión por Crímenes de Lesa Humanidad - presentándose ante los incautos y desinformados electores, todo maquillado, aparentemente moderno y renovado, cuando en el fondo es mas de lo mismo. En efecto, mientras que algunos infelices intentan vender en los medios que controlan esos grupos de Poder, la falsa idea que Keiko Fujimori “ha cambiado y se ha alejado de su padre”, Hildebrandt hace un ejercicio de memoria fundamental recordando lo que es el fujimorismo en su naturaleza: Aniquilación del Estado de Derecho, asesinatos en masa de miles de inocentes, saqueo generalizado de las Arcas Públicas, destrucción de las instituciones, vomitivas campañas mediáticas a través de la prensa basura liderada por El Comercio, compras de conciencias de congresistas, periodistas y empresarios en la infame salita del SIN, etc. Asimismo, el director de “Hildebrandt en sus Trece” consideró que la candidata presidencial de la mafia homicida (la que no trabaja, pero que se da la gran vida con los miles de millones de dólares que su padre robó al Estado, producto de las privatizaciones de las empresas públicas) no es capaz de condenar los crímenes que ocurrieron durante el sangriento régimen de Kenyo Fujimori, y por el contrario, en reiteradas ocasiones ha declarado que está “orgullosa” de ello y consideró que la agrupación ha tomado distancia de los personajes “históricos” del fujimorismo - que por cierto ha acaparado las portadas de esa inmunda prensa de alquiler - solo son parte de una táctica electorera. “El haberse librado del lastre más notorio es para hacer una pantomima. Martha Chávez se lo ha dicho de un modo malignamente inteligente. Se trata de que Keiko gane las elecciones, nada más. Es por ello que todos los intentos de hacer creer al electorado de su aparente cambio, son solo eso: intentos de maquillaje” indicó. Asimismo Hildebrandt cuestionó las adhesiones de Vladimiro Huaroc y Yeni Vilcatoma al fujimorismo, de cara a las elecciones de abril próximo.“Como yo no me he graduado de tetudo, no le creo ni una palabra a Vilcatoma, cuyo patético figuretismo siempre me pareció de lo más sospechoso y, por supuesto, menos le creo al muy galán Vladimiro Huaroc; no le creí jamás y el tiempo me ha dado la razón”, aseveró. Asimismo, cuestionó que es indignante que Keiko Fujimori aparezca primera en las encuestas de intención de voto, ya la hija de del genocida “es la heredera neta de la década más infame que padeció el Perú”. En otro momento de la entrevista, Hildebrandt sostuvo que la corrupción regresará en un eventual gobierno de Keiko Fujimori. Además, podrían hacer nuevamente uso de las campañas psicosociales a través de la prensa basura para justificar un mayor autoritarismo “El fujimorismo piensa que las instituciones no valen, que la separación de poderes puede valerse en cualquier momento de una emergencia y que la democracia sin autoritarismo es una democracia liberal de tontos. Eso no va a cambiar, ojo, y eso que no estoy añadiendo el asunto de la corrupción, que no tengo dudas que regresará, porque Keiko no tiene autoridad moral alguna como para pararla”, señaló. Se trata de una entrevista que que desnuda a la mafia asesina en su integridad, presentándola tal como es y no como quieren hacerte creer. Como sabéis, hace 17 años salieron miles de peruanos de todas las ciudades y de todas las edades para decirle NO al dictador Kenyo Fujimori. Tú quizás ya no lo recuerdes o quizás no lo viviste, pero fue uno de los momentos más importantes de la historia democrática del Perú. Se le dijo NO a un régimen entreguista que privatizó todo lo que quiso y robó miles de millones de dólares al país, a la salud, a la educación. Se le dijo NO a un gobierno servil a los empresarios que destruyó el derecho laboral y que barrió con los sindicatos. Se le dijo NO a un gobierno corrupto que compró congresistas, militares, gente de la farándula y hasta deportistas para sus intereses de eternizarse hasta el infinito. Se le dijo NO a un gobierno asesino que no solo encarceló a sus opositores, sino que también los desapareció mediante sus escuadrones de la muerte, asesinando a miles de inocentes y cuyas familias siguen sin creer que, a pesar de todo lo ocurrido en esos años de terror, un 30% de peruanos - como si sufrieran de amnesia colectiva - quieran votar nuevamente por ese cáncer maligno que es el fujimorismo. Allá los columnistas de la prensa basura que se crean el cuento de que la bestia ha cambiado. No lo hizo y nunca lo hará. Mientras haya memoria, siempre habrá que decir una y mil veces: NO :)