martes, 29 de marzo de 2016

LA TELEVISIÓN BASURA: Una herencia de la podredumbre fujimorista

Hace una semana - como salida del desagüe al cual pertenece - hizo su reaparición publica Laura Bozzo, para anunciar desde su “exilio” en Méjico su apoyo a la candidatura de la hija de un despreciable Genocida condenado a 25 años de prisión por Crímenes de Lesa Humanidad y de quien fue uno de sus más miserables legados. Como sabéis, la televisión peruana, denominada acertadamente como “TV basura” por sus contenidos nauseabundos, repugnantes y sobre todo pobrísimos en calidad e ínfima categoría, no es un problema de actualidad. Durante estos últimos años, muchos han olvidado cuándo se originó esta clase de TV cloaca que embrutece a los peruanos las 24 horas del día. Pero a escasos días del 10 abril, es menester refrescar una vez más la memoria y recordar que el problema de hoy en la televisión peruana se gestó durante la dictadura criminal de Kenyo Fujimori, cuya premisa siempre fue, sin duda, la de distraer a la colectividad por medio de programas y producciones de los mas cutres y sin ningún tipo de mensaje, logrando idiotizar e involucionar rápidamente a la gran mayoría de peruanos, acostumbrándolos a ver estiércol en las pantallas y disfrutar de la inmundicia que los canales de señal abierta les ofrecen a todas horas como realitys, concursos y programas de espectáculos donde la vulgaridad y el mal gusto acampan a sus anchas. Uno de los grandes “baluartes” a favor de la involución de esta televisión basura que se aprecia hasta el día de hoy la encabezaron Magaly Medina, Gisela Válcarcel y Laura Bozzo, expertas en ese vil trabajo: liquidar la conciencia humana y llenar de estropajos la cabeza de los televidentes peruanos con sus miserias. Es así como el Perú se fue al fango de excremento y lodo cuando ese miserable dictador - hoy encerrado en la cárcel purgando sus múltiples delitos - hizo lo que le vino en gana con el país, sus instituciones y sus medios de comunicación a los cuales compro en la tristemente célebre salita del SIN con dinero proveniente de las Arcas Públicas. La televisión inmunda empezó justamente con Fujimori desde aquel 5 de abril de 1992 en donde comenzó a podrirse todo, absolutamente todo, incluida la TV peruana. Desde aquella época de los inicios de los 90, la senda de la televisión peruana no ha variado, sino todo lo contrario.  Es así como productores, pseudoperiodistas y conductores de un sinfín de programas no hacen más que seguir el camino marcado de la imbecilidad y estupidez que hoy prima en la gran mayoría de peruanos. Asalariados de la mafia homicida, estos miserables que se vendieron a la dictadura pretenden desde los programas políticos que conducen en esos medios, darse aires de “fiscalizadores” cuando no tienen ninguna autoridad moral para hacerlo. Un capitulo aparte merecen los telediarios (o noticieros como los llaman en este país bananero). En mi vida había visto programas tan mediocres como estos que no informan absolutamente nada de lo que sucede en el mundo. En una hora de transmisión por ejemplo, apenas le dedican unos minutos a la actualidad política local, rellenando el resto del horario con repulsivas notas policiales y lo que es peor, resúmenes de sus mediocres programas o culebrones emitidos la noche anterior. Para esa clase de programas “informativos” no existen prácticamente las noticias internacionales, no tienen corresponsales en el exterior, ni mucho menos realizan informes sobre temas de palpitante actualidad, limitándose a piratear las señales extranjeras, dedicándole unos segundos como si fueran de relleno antes de irse a comerciales. No me sorprende por ello la ignorancia de esta gente cuando se les habla de temas de interés general, que no comprenden porque ni están enterados. Pero si nos refiriéramos a otra clase de notas que aparecen diariamente en esa prensa inmunda de cincuenta céntimos - que es consumida con gran avidez - ahí si se la saben todas. Este es uno de los infames legados de Kenyo Fujimori que perduran hasta el día de hoy y que este 10 de abril no debéis olvidarlo por ningún motivo :(