COPA LIBERTADORES DE AMÉRICA: Un torneo negado para el fútbol peruano

Es la misma historia de siempre que se repite cada año indefectiblemente. En efecto, esta semana el mediocre fútbol peruano se encontró con su dura y patética realidad. Una realidad que indica que no solo esta muy lejos de tener un equipo que pueda conseguir ganar alguna vez la Copa Libertadores, sino que cada año se aleja más de poder competir a nivel internacional. Es así como la vergonzosa eliminación de Alianza Lima y Deportivo Binacional - finalistas del insulso y aburrido campeonato 2019 - dejó en evidencia la poca seriedad que se le da al certamen y alarga todavía más la interminable racha de fracasos del fútbol peruano. ¿Cuáles son las razones? Se puede comenzar por la conformación de los planteles con jugadores del montón para competir a nivel internacional, y allí están los lapidarios resultados. Por ejemplo, Binacional decidió priorizar la inversión en la iluminación del estadio Guillermo Briceño, ubicado en Juliaca a 3825 metros sobre el nivel del mar, con la finalidad de hacerse fuerte y complicar a los rivales en la altura. Sin embargo, los ¿dirigentes? se olvidaron de lo más importante: tener un buen plantel y reforzarse para competir. No se puede apelar a querer ganar todos sus partidos en la altura sin el respaldo de un buen equipo. La salida de varios futbolistas que lograron de pura suerte el campeonato nacional en el 2019 no fue bien reemplazada con los jugadores que llegaron. Por su parte, Alianza Lima buscaba perfilarse este año para ser un equipo que pudiera competir en el torneo local y en la Libertadores, pero nada de ello ocurrió. Los ingresos obtenidos por el cuadro blanquiazul en las temporadas 2017, 2018 y 2019 por la clasificación a Libertadores y por llegar a la final del fútbol peruano, le permitieron tener un presupuesto mayor. De esta manera, Alianza empezó la temporada con el plantel más amplio del campeonato. Sin embargo, en la reactivación se dio la salida de 5 futbolistas por una serie de factores: ya sea por indisciplina, venta al extranjero, culminación de contratos y por temas personales. De esta manera, el cuadro del chileno Mario Salas dejó de ser ese equipo con variantes y solo sumó a quien tenía dos fechas de suspensión en el certamen. Asimismo, en Alianza Lima también se dio el cambio de técnico. El uruguayo Pablo Bengoechea dejó el cuadro blanquiazul y la directiva apostó por el proyecto Mario Salas. El estratega chileno llegó con la finalidad de darle una manera de jugar distinta al cuadro de La Victoria para así repetir la campaña que tuvo con Sporting Cristal en el 2018. Sin embargo, desde el reinicio del campeonato, Alianza no sabe ganar y el equipo no logra plasmar la idea del técnico. Se puede explicar de esta manera la humillante eliminación de Alianza Lima y Binacional, que demuestra meridianamente la distancia sideral en cuestiones técnicas y tácticas existente entre el fútbol peruano y el que se practica en otros países a nivel de clubes y selección. Cabe destacar que en este último punto, no se repetirá en esta ocasión que - gracias a unos puntos regalados en mesa por Bolivia - el Perú estuviera presente en el mundial de Rusia 2018, ya que simplemente no lo merecía. Y es que el fútbol peruano es mediocre y siempre lo ha sido y apela al factor suerte para ver así puede cambiar su triste situación, el cual volvió a quedar en evidencia en una humillante semana para el hincha peruano con aplastante derrota de 6-0 del cuadro de Juliaca ante River Plate y el 2-0 de Racing de Avellaneda en Matute. Por cierto, a escasas semanas del inicio de las eliminatorias para Qatar 2022 y dado el actual desastre de su organización, la humillación del Perú será histórica. Preparémonos para disfrutar de esa masacre…. las risas que nos vamos a echar. Al mencionar que cada año el fútbol peruano en su conjunto se aleja de competir a nivel internacional (sea en la Libertadores, la Sudamericana, Copa América y Eliminatorias) es porque mientras otros países crecen en lo futbolístico y potencian otros aspectos del deporte, en el Perú no sucede ello y viven de fantasías y falsos recuerdos cada vez más borrosos y lejanos. Venga ya, seria aconsejable prohibir la participación de los equipos peruanos en los torneos deportivos para evitar que sigan haciendo el ridículo ¿A que no se les cae la cara de vergüenza? :)