sábado, 19 de septiembre de 2020

PERÚ: El Rey está desnudo

Como recordareis, en el conocido cuento de hadas del danés Hans Christian Andersen 'El nuevo traje del emperador', un niño grita algo así como “el rey está desnudo” o “el rey va desnudo”, reconociendo lo que los demás intentan ignorar. La historia es una fábula con un mensaje de advertencia: solo porque todo el mundo crea que algo es verdad, no significa que lo sea. Esta expresión, se usa a menudo para aludir a una situación en la que una amplia mayoría de observadores decide de común acuerdo compartir una ignorancia colectiva de un hecho obvio, aun cuando individualmente reconozcan lo absurdo de la situación. También se usa en referencia a la verdad vista a través de los ojos de un niño, en la idea de que la verdad a menudo la dice gente demasiado ingenua para entender que haya grupos de presión que dicen lo contrario a la verdad que está a la vista de todos. Y como es obvio, también se usa en el ámbito político para referirse a cualquier hecho o situación negados por la mayoría, a pesar de la evidencia comprometedora que demuestra lo contrario, especialmente cuando quien lo difunde es el gobierno a través de sus voceros intentando negar lo evidente. Esto se puede aplicar perfectamente al Perú, donde este viernes se llevo a cabo la esperada votación en el Congreso para vacar por incapacidad moral a Martin Vizcarra, un impresentable individuo - cabecilla de una organización criminal denominada los injertos moqueguanos - que de manera ilegal usurpa el cargo de ‘presidente’ y que no fue elegido por nadie, pero al que trata de aferrarse como pueda porque sabe que debido a la gravedad de sus delitos, mas temprano que tarde terminara en la cárcel junto a esa troupe de parásitos comunistas que han destrozado al país. De nada le ha valido comprar a los congresistas para que voten en contra de la vacancia a cambio de obras en sus regiones e intimidando a la cabecilla de la mafia con volver a enviarla a la cárcel, su destino ya esta sellado. La bajeza moral de ese improvisado elemento ya esta sobradamente apuntada. Los ignominiosos vizcaudios propalados recientemente solo confirman las reiteradas sospechas acerca de su calidad moral y los siniestros personajes de su entorno criminal. En este patético escenario, ¿a quién puede sorprenderle que este sea el país con el peor manejo de la pandemia del Coronavirus y con una crisis económica galopante? Sin embargo, a través de una prensa servil a sus oscuros intereses reeleccionistas, intenta hacer creer a los peruanos “que viven en el mejor de los mundos” cuando ello no es cierto. Es evidente que este (des)gobierno - rodeado de una panda de mediocres, oportunistas y advenedizos de todo pelaje que sobreviven solamente porque el Estado está lleno de gente insignificante a quienes la ciudadanía les paga puntualmente un sueldo fabuloso por sus incapacidades – no da para mas. Burócratas sin preparación suficiente para servir al país dentro de un cargo estatal. Con mayor razón si se prestan a trabajar con un régimen golpista que conduce al despeñadero a 32 millones de peruanos. Y lo más grave todavía, practicantes sin ninguna experiencia laboral integran un gabinete ministerial donde se adoptan acuerdos de capital importancia para el destino del país. El resultado es el desastre total que están dejando y pasaran décadas antes que el país pueda recuperarse económicamente. No es de extrañar que de esa ínfima calaña sean todos aquellos que firman parte de esta desastrosa gestión, la peor en la historia del Perú, que no se ha visto ni siquiera tras la ignominiosa derrota en la Guerra del Pacifico o en la lucha contra el terrorismo de grupos criminales afines al vizcarrismo, para quienes sus cabecillas como Hugo Blanco y Abimael Guzmán son “héroes” y “ejemplos a seguir” (?) Desde el mendaz, taimado y conspirador Vizcarra, pasando por incompetentes rojetes quienes ocupan cargos de ministros, secretarias, asistentes, amanuenses, etc. que anidan en el palacio presidencial. En este país corrompido hasta la médula, donde los medios de comunicación - quebrados económicamente - están vendidos al régimen golpista bajo esa ficción denominada “avisaje estatal”. Nombre sutil para la formalización del soborno, disfrazada de facturas “por servicios publicitarios al Estado” quienes son muy útiles para sus campañas mediáticas de desinformación y cortinas de humo al estilo montesinista para desviar la atención publica de los verdaderos problemas que aquejan al país producto de la incompetencia e improvisación de ese incapaz que busca eternizarse en el poder. No nos sorprende que también se haya vuelto a institucionalizar como en la época del fujimorismo la interceptación telefónica en todas las esferas - pública y privada - con fines inconfesables. Tampoco no olvidemos que Vizcarra clausuró ilegalmente el Congreso anterior perpetrando un golpe de Estado aún más flagrante que aquel del 5 de abril de Fujimori. No contento con ello, está abocado a acosar, incordiar, atacar, ignorar y despreciar al Legislativo que le ha salido conflictivo, pese a que él mismo orquestó vilmente el proceso electoral que diera luz al actual Parlamento. Convertido en el capo de una organización criminal dirigida desde Palacio de Gobierno, su función es urdir tramas para disfrazar los delitos que cometen tanto Vizcarra como sus secuaces para obstaculizar la justicia, escondiendo y/o sustituyendo las pruebas de delitos flagrantes, con la complicidad de la Fiscalía de la Nación que opera como apéndice del Ejecutivo al servicio del régimen. Así, mientras los fiscales mercenarios denuncian a los opositores políticos fabricándoles acusaciones sin fundamento, a su vez miran para otro lado cuando se trata de investigar los actos delincuenciales que practica el usurpador a vista y paciencia de todo el mundo. Por tanto, ¿acaso existe diferencia entre los métodos draconianos de Blanca Nélida Colán, ex fiscal de la Nación fujimorista, y el estilo mafioso que aplica Pedro Sánchez, su homólogo contemporáneo? ¡Ninguna! Las evidencias confirman que Vizcarra usa los mismos métodos antidemocráticos y delictivos de Fujimori. Son tal para cual y por ello debe ser combatido implacablemente sin pausa alguna. No cabe duda que al margen de los resultados de la votación en el Congreso, Vizcarra esta acabado. Miente reiteradamente acerca de su rotundo fracaso para combatir el Coronavirus y que como producto de sus políticas populistas, ha destruido completamente la economía. Al estar completamente deslegitimado ¿Cómo este cabecilla de una red criminal que falsea testimonios va a poder garantizar el próximo año un proceso electoral limpio? El fraude como podéis suponer, ya esta en marcha, con el presentándose como el “Salvador del Perú”. Venga ¿que se puede esperar de un sujeto sin principios ni moral, quien recurre una y otra vez a la mentira para encubrir sus aberrantes delitos y que pone en puestos públicos a oscuros y mediocres personajes sin mérito alguno aprovechando el cargo que ocupa ilegalmente producto de su traición a Kuczynski?. Totalmente vergonzoso. Si ese infeliz cree que por el resultado de una votación en el Congreso me van a doblegar, esta muy equivocado. A mi me gustan los retos y que se prepare para lo que se viene :)