martes, 7 de septiembre de 2021
LA VERDAD SOBRE EL ESPANTO: El Perú en tiempos del horror
En el 2003, la revista Caretas publico un dossier fotográfico de 232 páginas titulado La Verdad Sobre el Espanto que trata acerca de la bestialidad comunista que se cebo en el país andino en las décadas de los 80 y los 90 del pasado siglo por obra y gracia de Sendero Luminoso, un demencial grupo terrorista liderado por Abimael Guzmán Reinoso quien baño de sangre al Perú en su desquiciado intento de implantar el comunismo en su variante más extrema y perversa (marxismo - leninismo - mariateguismo - maoísmo - Pensamiento Gonzalo) sobre los cadáveres de millones de peruanos. Si bien fracaso miserablemente en su intento y que una vez capturado en 1992, fue exhibido en una jaula con su traje a rayas, para luego ser condenado por sus monstruosos crímenes a Cadena Perpetua y recluido en la Base Naval del Callao, antes se llevo por delante a más de 70 mil inocentes, víctimas de las muertes más atroces que uno se pueda imaginar, cómo ser volados en mil pedazos con dinamita y coches bomba, o despedazados a machetazos, realizados por aquellas hordas asesinas que seguían a su enloquecido y desalmado “Presidente Gonzalo”. Para desgracia del Perú, esta no fue la única amenaza que le toco sufrir, ya que a su vez otro grupo terrorista de inspiración aprista (MRTA) también hacia de las suyas en una macabra competencia de la muerte. Y si a ellos sumamos los grupos paramilitares surgidos desde el propio Estado para combatirlos (Comando Rodrigo Franco y Grupo Colina, entre otros) así como malos elementos de las Fuerzas Armadas que cometieron una serie de excesos, podéis imaginar el infierno que se vivía por aquellos atormentados días. Con el descabezamiento de esos grupos criminales, muchos pensaron que esta espiral de violencia no volvería a repetirse y que los peruanos habían aprendido dolorosamente la lección, pero cuan equivocados estaban ya que los terroristas cambiaron su estrategia y metamorfoseándose con otros nombres (MOVADEF- Conare - Perú Libre) utilizando la vía electoral que le ofrecía el mismo Estado “opresor” que juraron destruir, se hicieron con el poder mediante el fraude y ahora un oscuro individuo de limitado lenguaje y demagogo consumado llamado Pedro Castillo - uno de los mas enfervorizados discípulos de Abimael Guzmán - está en Palacio y no oculta su deseo de imponer al margen de la ley una nueva Constitución que le permita no solo eternizarse en el cargo, sino instaurar “su república popular de nueva democracia”. Es por este motivo que para evitar que esta maldad se convierta en realidad, los peruanos de bien deben mostrar su firme rechazo a ese régimen infestado de elementos terroristas que fungen de “ministros” y combatirlos sin descanso. Precisamente, por estos días en que se conmemora la captura del genocida Guzmán (a quien Castillo busca la manera de liberar concediendo un indulto “humanitario” a semejante monstruo), Caretas ha vuelto a publicar el citado dossier - el cual abarca desde el inicio de las acciones terroristas en 1981 hasta la captura del siniestro “asesor” Vladimiro Montesinos y su adjunto Santiago Martin Rivas, cabecilla del Grupo Colina, que durante el fujimorismo, cometió atroces crímenes - aunque al residir fuera del país desconozco si es similar a la edición original que poseo o una actualizada. En todo caso, en el se puede apreciar la barbarie senderista en toda su magnitud, asi como las matanzas orquestadas por el APRA y Fujimori a modo de respuesta, una época terrible que nunca más debe volver a repetirse. Solo me quedaría agregar que de aquí a unos años podrían hacer una segunda parte del dossier - que bien podría titularse La Verdad Sobre el Espanto 2 - desde la captura y condena de Fujimori, la actividad narcosenderista en el VRAEM, el suicidio de Alan García, la complicidad manifiesta de Vizcarra y Sagasti con los remanentes del terrorismo permitiendo su reagrupamiento, así como el oscuro inicio, auge y caída de Perú Libre, con Castillo y la banda delincuencial que lo rodea, terminando tras las rejas que es donde deben de estar. Esperemos que ello llegue más pronto de lo que uno espera. Es mas, a 29 años de la captura de Abimael Guzmán y que se conmemora este 12 de septiembre, hay que redoblar esfuerzos para que el monstruo no vuelva a levantar su horrible cabeza ¿No os parece? :)