Venga ya, luego de mucho tiempo volvemos a ocuparnos de este impresentable sujeto y que mejor hacerlo que dejando al descubierto sus oscuros negociados con Odebrecht, una constructora brasileña implicada en sonados casos de corrupción en su país y que debido a sus cuestionadísimas inversiones en otros países de América Latina, ha ganado licitaciones de importantes obras públicas mediante coimas millonarias pagadas a funcionarios extranjeros para hacerse con ellas. El escándalo desatado en el Perú - que es lo que nos compete - involucra a políticos corruptos e inescrupulosos a quienes estando en el gobierno según su propia confesión, ‘la plata les llegaba sola’. Obviamente nos estamos refiriendo a Alan García Pérez, que si bien no es el único que recibió jugosas ‘coimisiones’ por parte de esa empresa brasileña, es el que mas se beneficio con estos negociados ya que durante su corrupto gobierno se dieron inicio a una serie de obras publicas de gran envergadura, como el inacabado Tren Eléctrico (hoy Metro de Lima) y la Carretera Interoceánica - hechas con sobrecosto lo cual ha sido gravemente perjudicial para el Estado peruano - y que en ‘agradecimiento’ por el favoritismo recibido por parte de Palacio, Odebrecht le ‘regalo’ esa horrible y grotesca escultura de polietileno llamada ‘el Cristo del Pacifico’, levantada apresuradamente al final de su gestión en Chorrillos en medio de una gran polémica ¿a que no se acuerdan?. El escándalo se reactivo tras darse a conocer el acuerdo firmado por la compañía con el Departamento de Justicia de los EE.UU., donde se da cuenta que Odebrecht pagó 29 millones de dólares en sobornos a funcionarios entre el 2005 y 2014, años que comprenden los gobiernos de Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016), de los cuales 20 millones de dólares se ‘adjudicaron’ en el 2008, durante el régimen aprista. Eso no es todo, ya que entre los funcionarios comprometidos con estos actos de corrupción también se encuentran Pedro Pablo Kuczynski (entonces ministro de de Toledo) y el alcalde de Lima Luís Castañeda Lossio. No es de extrañar por ello que exista mucho nerviosismo en la administración pública y dirigentes políticos por esta denuncia, ya que en los próximos días se detallara con documentos y otras pruebas irrefutables quienes fueron los directos ‘beneficiados’ de esos sobornos, por lo cual deberían terminar sus días tras las rejas. Trate de quien se trate, no debe haber impunidad para nadie y de comprobarse fehacientemente su culpabilidad, a la cárcel con todos los involucrados ¿vale?. De todos ellos, el más comprometido sin duda alguna es Alan García, cuyas relaciones con Odebrecht son de vieja data, según un informe dado a conocer esta semana por IDL-Reporteros, que pos su interés he decidido reproducirlo in extenso, entrecomillado claro está: “El pasado 21 de diciembre, el Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que las compañías Odebrecht y Braskem, la gigante petroquímica que tiene a Odebrecht como accionista mayoritario, se declararon culpables de corrupción y acordaron pagar por lo menos 3 mil 500 millones de dólares de multa conjunta para resolver el más grande caso de internacional de coimas en la historia. Ello se materializó a través del pago de cientos de millones de dólares en coimas y sobornos a funcionarios gubernamentales en tres continentes. Tanto Odebrecht como Braskem han reconocido plenamente su culpa, aceptado su responsabilidad e iniciado un proceso colectivo de confesiones y delaciones que involucra a por lo menos 80 altos funcionarios de Odebrecht y a muchos otros de Braskem. El esquema de delaciones está centrado en Brasil pero se realiza en estrecha coordinación con las autoridades fiscales y policiales de EE.UU. y Suiza. Según declaró el Fiscal Adjunto de la División Criminal del Departamento de Justicia estadounidense, Sung-Hee Suh, Odebrecht y Braskem utilizaron una unidad de negocios clandestina pero plenamente funcional –un departamento de sobornos, digamos- que pagó sistemáticamente varios cientos de millones de dólares a funcionarios gubernamentales corruptos en tres continentes. Uno de lo países es el Perú. Efectivamente, según los documentos hechos públicos este 21 de diciembre por el Departamento de Justicia, entre los años 2005 y 2014 Odebrecht pagó aproximadamente 29 millones de dólares en pagos a funcionarios gubernamentales peruanos para asegurarse los contratos de obras públicas. Odebrecht obtuvo beneficios de más de 143 millones como resultado de esos sobornos: Alrededor del 2008, Odebrecht se presentó a una importante licitación de transporte en el Perú. Para ganarla, “Odebrecht acordó pagar un millón 400 mil dólares a un alto funcionario del gobierno de Alan García, quien actuaba por encargo de Palacio. Gracias a este soborno, alrededor del 2009, Odebrecht ganó el contrato valorizado en aproximadamente 400 millones. En el 2009, la única obra que le fue adjudicada a Odebrecht, a través del Consorcio Tren Eléctrico Lima (Odebrecht y Graña y Montero), fue la construcción del Tren Eléctrico (Hoy Metro de Lima) Línea 1 tramo 1. El contrato se firmó el 23 de diciembre del 2009 por el monto de 410 millones de dólares. Pero no fue el único, ya que anteriormente en el 2005 Odebrecht participó en una licitación para un proyecto gubernamental de infraestructura. Durante el proceso de licitación, un empleado de Odebrecht fue convocado por el intermediario de un alto funcionario del gobierno de Alejandro Toledo, que ofreció ayudar a que Odebrecht gane la licitación a cambio de sobornos. Luego de la conversación con el intermediario, el empleado de Odebrecht participó en varias reuniones, en algunas de las cuales estuvo presente el funcionario gubernamental por encargo de Alejandro Toledo y su ministro Pedro Pablo Kuczynski. Como era de esperar, Odebrecht ganó la licitación y realizó pagos por aproximadamente 20 millones de dólares desde el 2005 hasta el 2008 a compañías específicas, indicadas por el intermediario - ya en el gobierno de García - con fondos no registrados de la División de Operaciones Estructuradas. Las obras de infraestructura adjudicadas a Odebrecht en esa oportunidad fueron IIRSA Norte, por un monto de 258 millones de dólares; IIRSA Sur Tramo 2 por un monto de 263 millones de dólares; e IIRSA Sur Tramo 3, por 395 millones de dólares. Todas con un escandaloso sobrecosto. Además, las tres IIRSAs son las obras en las que Odebrecht ganó el mayor número y el mayor monto por arbitrajes ‘contra’ el Estado. Más de 200 millones 500 mil dólares en las tres obras. Como en otras obras, el monto de la coima significó una multiplicación de ganancia a favor de Odebrecht. En cuanto a los pagos por sobornos de aproximadamente 20 millones de dólares a compañías específicas indicadas por el intermediario, IDL-Reporteros reveló en abril de este año el complejo proceso de transferencias mediante el que Odebrecht transfirió casi 12 millones de dólares hacia y desde el Perú a través de una red de empresas controladas por Gonzalo Monteverde y María Isabel Carmona Bernasconi. En el proceso participaron offshores comprobadamente vinculadas al lavado de coimas provenientes de Odebrecht, como Constructora Internacional del Sur. Pero el principal aportante fue el Consorcio IIRSA Norte. Buena parte de esos 12 millones fueron a parar a la cuenta en un banco de Barbados, de una offshore panameña: Balmer Holding Assetts, creada con singular sigilo por la hoy notoria Mossack Fonseca. En total, según el informe del Departamento de Justicia, Odebrecht realizó pagos por aproximadamente 29 millones de dólares a funcionarios del gobierno peruano, para asegurarse la concesión de contratos de obras públicas. Como resultado de esos casi 30 millones en coimas, Odebrecht logró utilidades adicionales de más de 143 millones de dólares. Es decir, que por cada dólar que pagó para sobornar a funcionarios del gobierno peruano, Odebrecht ganó 5 dólares más a costa del país, según la propia compañía confesó al gobierno de Estados Unidos. Y eso fue solo el comienzo” puntualiza la nota. Como podéis notar, las más jugosas ‘coimisiones’ dadas por Odebrecht fueron cobradas durante el corrupto régimen aprista y demás esta decir quien fue el principal beneficiado: Alan García Pérez. Toca a la justicia investigar y sancionar a este miserable con todo el peso de la Ley. Si bien no es el único se trata del pez más gordo ya que se llevó la parte del león, por lo cual deben estar concentradas en el todas las investigaciones ¿no os parece? Para los que no confían en el Poder Judicial peruano - infestado por miembros de la mafia - es una buena noticia saber que la Corte de Nueva York es competente para juzgar la recepción de cualquier coima que haya pasado por una cuenta en ese país. A los que ya no tienen el beneficio de antejuicio se les puede extraditar o también detener en los Estados Unidos si pisan ese territorio y hay una orden contra ellos, para ser juzgados y sancionados por sus delitos. Ahí te quiero ver, panzón (Al momento de escribir esta nota, me entero que un fiscal ha ordenado abrir investigación preliminar contra Alan García por el delito de lavado de activos, basado en un informe de la Megacomisión del Congreso pasado y que ilegalmente había sido archivado. Veamos como se desenvuelve este caso) :)
