MONUMENTO A CRISTOBAL COLÓN: En homenaje al Gran Almirante

Ubicada en el centro de Lima - entre la Plaza Grau y la Plaza Bolognesi - se encuentra el Paseo Colón, llamado así en homenaje al insigne descubridor de América, Cristóbal Colón, cuyo monumento por cierto, también se encuentra presente en el. La escultura del navegante fue obra del escultor italiano Salvatore Revelli, tal como se halla la inscripción en dicho monumento, y la base fue obra de Guiseppe Palombini, fue realizada en la década de 1850 durante el gobierno de Rufino Echenique. Siendo develado el 3 de agosto de 1860, durante el gobierno de Ramón Castilla. En el contexto de la guerra con Chile, durante la ocupación de Lima, se intentó llevar la escultura con su pedestal y todo como trofeo de guerra a Chile, pero no lograron su objetivo, ya que ellos tenían planeado colocarlo en la Alameda de las Delicias en Santiago. Por cierto, la estatua de mármol se caracterizo por ser muy viajera, ya que estuvo en distintos lugares. Siendo asimismo la que más cambios de ubicación ha tenido. Documentos de la época cuentan que el monumento debió haber sido colocado en la Plaza Santa Ana (hoy Plaza Italia), debido a que el lugar congregaba a la colonia italiana, que agradeció al gobierno de Echenique por dicha propuesta escultórica. Pero con el ascenso de Castilla al Poder, se ordenó su emplazamiento a la Alameda de Acho, ya que era un espacio de mayor tránsito y esparcimiento, presto a la sociabilidad y el ocio de clase. De esta manera, por Decreto Supremo del 19 de mayo de 1859 se dispuso la colocación del monumento de Cristóbal Colón en el óvalo de la Alameda de Acho, cuya inauguración se dio el 3 de agosto de 1860, durante el gobierno de gobierno de Ramón Castilla. Luego a comienzos del siglo XX, en la recién inaugurada vía del 9 de diciembre –dividiendo de esta manera el Parque de la Exposición, ya que se trazo para pasar por el medio - se ordena colocarlo en el lugar que hoy ocupa el monumento a Grau, para luego ser trasladada algunos metros de la vía cercanos a la plaza Bolognesi, siendo esta su ubicación definitiva, rebautizando además la avenida como Paseo Colon. La escultura muestra el contacto de dos mundos en donde el Gran Almirante está representado con una vestimenta renacentista (capa que le cubre el cuerpo y una gorra con plumas que le cubre la cabeza) propia de su época, mientras toma de la mano a una india semidesnuda del Caribe, a la vez que ambos están agarrando una cruz. A su vez Colón, dirige sus ojos fijamente al cielo , como haciéndole saber a Dios que acaba de conseguir nuevos fieles y que los ha rescatado de la idolatría. El rostro de Colón tiene una actitud de protección y benignidad, se quiere comunicando la idea de que se trato de un descubrimiento pacífico que trajo como beneficio a esas tierras salvajes la civilización de Occidente. En tanto, la mujer india semidesnuda representa al nuevo mundo (América) descubierto por Colón. Ella presenta su cabeza adornada con una corona de plumas y se halla con los pechos descubiertos. Asimismo, lleva sobre su espalda un carcaj repleto de flechas, quien además está de rodillas mirando la cruz, demostrando con ello que ha abandonado sus idolatrías paganas para recibir a la religión verdadera de Cristo. Se trata por ello de un monumento lleno de simbolismos que los peruanos deben conmemorar cada 12 de octubre agradeciendo la gesta española, ya que de haber sido los ingleses los primeros en llegar, hoy ustedes no existirían. Así de simple.