Esto solo puede ocurrir en el Perú donde un chorizo de la peor especie como Alan García Pérez, quien durante sus dos periodos de gobiernos cometió múltiples delitos (por los cuales en cualquier otra sociedad civilizada ya estaría tras las rejas pagando por ellas) de manera inexplicable aun continua en libertad y no rinde cuentas de sus actos ante la Justicia. Ha pasado año y medio de la llegada al poder del “nacionalista” Ollanta Humala quien como el candidato de la “gran transformación” prometió en su campaña no dejar sin castigo a esta menuda panda de miserables que saquearon a su gusto el Perú, pero vemos que en este campo tampoco cumplió con su palabra y al igual que en la economía, hace todo lo contrario, traicionando a sus electores de la manera mas ruin y miserable que uno recuerde.
¿Y las comisiones formadas en el Congreso para investigar sus actos ilícitos? A que esos parásitos no investigan nada porque también tienen rabo de paja. Es por ello que envalentonado por la impunidad que goza ilegalmente, García salio de su letargo y ha vuelto a lo suyo, preparando el camino para su soñada reelección en el 2016, una fecha aun muy lejana, pero como no quiere dejar nada al azar desde ya quiere deshacerse de sus posibles rivales y se ha subido a la revocatoria contra la alcaldesa de Lima Susana Villarán, para posibilitar el retorno al sillón municipal del cuestionado Luís Castañeda Lossio, envuelto en grandes escándalos de corrupción cuando estuvo al frente de la alcaldía de Lima. Pero ¿Por qué Alan García quiere tumbarse a Susana Villarán? Que varios apristas estaban rondando cerca de la revocatoria no era un secreto para nadie, pero lo que aún requiere explicarse es por qué Alan García ha metido al Apra de cabeza en el esfuerzo subalterno de tumbarse a la Tía Regia La única explicación es que en esta batalla por Lima hay ‘algo’ en juego que es más importante de lo que se cree. Porque, vamos, justificar este intento de revocatoria en una supuesta desastrosa gestión de Villarán sería imposible, pero más difícil sería imaginarse que el Apra se compre un pleito ‘ajeno’.Salvo que este pleito no le sea tan ajeno como se cree, ya que ahora es evidente que García se ha metido, con todo, en el esfuerzo de traerse abajo la gestión de Villarán. Eso se puede concluir al ver a la primera línea aprista defendiendo el ‘sí’ y atacando a Villarán, como a Javier Velásquez Quesquén y Jorge del Castillo. O a Mauricio Mulder y Mercedes Cabanillas conspirando abiertamente con los promotores del si, O ver el alineamiento de la prensa basura que ven en Alan García al patrón de la derecha criolla. O al publicista personal de AGP en el diseño de la estrategia del ‘sí’, cuya huella ya se percibe en el intento de convertir a Villarán en ‘pituca’ y ‘racista’ como antes transformaron a Lourdes Flores en la candidata de los ricos. Nada de esto ocurriría si Alan García no hubiera decidido meter de cabeza al Apra en esta aventura, aun cuando esto implique codearse, en el mismo coche en el que viajarán hasta el 17 de marzo, con ciertos impresentables y algunos mafiosos como determinados personajillos de los transportistas y de los comercializadores de alimentos.Sería ingenuo pensar que Alan García hace todo esto solo para ayudar a Luís Castañeda –el beneficiario directo de la defenestración de Villarán–, aun con el riesgo de que esta sea su tercera derrota electoral consecutiva tras el traspié en la municipal 2010 cuando apostó por Alex Kouri, y en la presidencial 2011 cuando se la jugó primero por Castañeda’ y luego por Keiko Fujimori.
En el esfuerzo subalterno de revocar al Municipio de Lima, al costo de que la ciudad tenga cuatro alcaldes en solo tres años, hay mucho más en juego, algo que se irá conociendo en las próximas semanas, pero de lo que ya no hay duda es de que quien está detrás del intento de tumbarse a Susana Villarán es Alan García, quien por la gravedad de sus delitos debe de estar acompañando a su socio Fujimori en prisión ¿no lo creen ustedes? :(
Caricatura: La República