Venga, cuando no las gallinas de la U acaparando las primeras planas por los escándalos que protagonizan. Y es que debido a los lamentables sucesos acaecidos el sábado en horas de la noche al finalizar un partido que se celebraba en el estadio Monumental, ha surgido un clamor generalizado entre la ciudadanía - basta con entrar a las redes sociales - exigiendo la clausura definitiva de ese recinto, ya que representa un peligro constante por la presencia en ella de las llamadas barras bravas - grupos de avezados delincuentes prontuariados que la conforman - que aprovechan el momento para hacer de las suyas cada vez que se realiza un encuentro “futbolístico”, originando un caos vehicular en la Javier Prado, asaltando a todo ser viviente que se cruce en su camino, así como cometiendo saqueos y destrozos en las viviendas aledañas, sin que la policía haga algo para detener a estos miserables. Al respecto, el polémico Phillips Butters ha escrito una interesante nota que me permito reproducir entrecomillado por ser de interés general ¿vale? : “Otra vez los delincuentes hacen lo que se les da la gana en el Monumental. La gran diferencia entre esta vez y las otras es que ahora sí murió alguien dentro del estadio. Un grupo de asesinos ha matado a Walter Oyarce. ¿Se acuerdan de Paola Vargas, quien murió muy cerca al Jockey Plaza?, ¿o de Johana Tantaruna, a quien le tiraron una tarola en la cara desde un palco?, ¿o del hincha del Boys que fue apuñalado en la tribuna sur? ¿Cuál es el común denominador de todos esos delitos?, pues la estúpida idea que repiten una y otra vez: “no se puede parar el espectáculo por un capricho de un alcalde, de un policía o de algún burócrata de Defensa Civil”, cuando el discurso civilizado debería ser: “primero la seguridad, después el fútbol”. ¿Quién se hará responsable de la muerte de Walter? Como es obvio, los primeros responsables son quienes lo agredieron y empujaron desde tal altura – resulta evidente que lo que buscaban era matarlo –, seguidamente deberán ser investigados los encargados de dar seguridad dentro del Monumental y en el edificio perimetral, léase, los palcos. Pregunto, ¿no sabían que se puede tener acceso de las tribunas a ese lugar?, ¿no se sabe que ingresan alcohol y drogas?, ¿cómo llegaron los homicidas desde norte hasta sur?, ¿cómo huyeron?, ¿hay videos de seguridad?, ¿hay videos de la zona interna?, ¿quién alquiló el palco fatídico y los aledaños?, ¿se sumó algún agresor desde esos lugares?, ¿porque la Policía capturó a los sospechosos y luego los soltó por miedo a la turba?, ¿qué pasaba si les disparaban con perdigones? Muchas preguntas para los cuales no hay respuesta. Directamente Pacheco, como presidente de la 'U' y dueño del Grupo Santo Domingo, debe dar la cara y detallar el operativo de seguridad que supuestamente contrató su empleado Enrique Sánchez; lo mismo debe hacer el señor Marco Paredes en representación de los 'palquistas'.También el Alcalde distrital debe explicar porque se permitía su existencia si no tiene licencia de funcionamiento. Que diferencia el trato que les dan a los negocios que son clausurados al instante y multados por carecer de ello. ¡Y ese Estadio ya tiene 11 años de construido y sigue funcionando ilegalmente! Mientras duren las investigaciones, el Monumental debe permanecer cerrado. El fútbol no es más importante que la vida”. Para finalizar solo me queda agregar que no basta con suspender temporalmente el recinto - tal como tardíamente lo ha hecho la municipalidad - ya que el problema persistirá si no es clausurado definitivamente, el club infractor descienda de categoría y sus pseudo dirigentes enjuiciados por ser los principales responsables del los desmanes que continuamente se realizan y de los cuales son cómplices de ello. Que caiga todo el peso de la ley a esta menuda panda de indeseables de una vez por todas. Este crimen no debe quedar impune. El país lo reclama :(
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Tuesday, September 27, 2011
PHILLIP BUTTERS: Otra vez Universitario en medio de la polémica
Venga, cuando no las gallinas de la U acaparando las primeras planas por los escándalos que protagonizan. Y es que debido a los lamentables sucesos acaecidos el sábado en horas de la noche al finalizar un partido que se celebraba en el estadio Monumental, ha surgido un clamor generalizado entre la ciudadanía - basta con entrar a las redes sociales - exigiendo la clausura definitiva de ese recinto, ya que representa un peligro constante por la presencia en ella de las llamadas barras bravas - grupos de avezados delincuentes prontuariados que la conforman - que aprovechan el momento para hacer de las suyas cada vez que se realiza un encuentro “futbolístico”, originando un caos vehicular en la Javier Prado, asaltando a todo ser viviente que se cruce en su camino, así como cometiendo saqueos y destrozos en las viviendas aledañas, sin que la policía haga algo para detener a estos miserables. Al respecto, el polémico Phillips Butters ha escrito una interesante nota que me permito reproducir entrecomillado por ser de interés general ¿vale? : “Otra vez los delincuentes hacen lo que se les da la gana en el Monumental. La gran diferencia entre esta vez y las otras es que ahora sí murió alguien dentro del estadio. Un grupo de asesinos ha matado a Walter Oyarce. ¿Se acuerdan de Paola Vargas, quien murió muy cerca al Jockey Plaza?, ¿o de Johana Tantaruna, a quien le tiraron una tarola en la cara desde un palco?, ¿o del hincha del Boys que fue apuñalado en la tribuna sur? ¿Cuál es el común denominador de todos esos delitos?, pues la estúpida idea que repiten una y otra vez: “no se puede parar el espectáculo por un capricho de un alcalde, de un policía o de algún burócrata de Defensa Civil”, cuando el discurso civilizado debería ser: “primero la seguridad, después el fútbol”. ¿Quién se hará responsable de la muerte de Walter? Como es obvio, los primeros responsables son quienes lo agredieron y empujaron desde tal altura – resulta evidente que lo que buscaban era matarlo –, seguidamente deberán ser investigados los encargados de dar seguridad dentro del Monumental y en el edificio perimetral, léase, los palcos. Pregunto, ¿no sabían que se puede tener acceso de las tribunas a ese lugar?, ¿no se sabe que ingresan alcohol y drogas?, ¿cómo llegaron los homicidas desde norte hasta sur?, ¿cómo huyeron?, ¿hay videos de seguridad?, ¿hay videos de la zona interna?, ¿quién alquiló el palco fatídico y los aledaños?, ¿se sumó algún agresor desde esos lugares?, ¿porque la Policía capturó a los sospechosos y luego los soltó por miedo a la turba?, ¿qué pasaba si les disparaban con perdigones? Muchas preguntas para los cuales no hay respuesta. Directamente Pacheco, como presidente de la 'U' y dueño del Grupo Santo Domingo, debe dar la cara y detallar el operativo de seguridad que supuestamente contrató su empleado Enrique Sánchez; lo mismo debe hacer el señor Marco Paredes en representación de los 'palquistas'.También el Alcalde distrital debe explicar porque se permitía su existencia si no tiene licencia de funcionamiento. Que diferencia el trato que les dan a los negocios que son clausurados al instante y multados por carecer de ello. ¡Y ese Estadio ya tiene 11 años de construido y sigue funcionando ilegalmente! Mientras duren las investigaciones, el Monumental debe permanecer cerrado. El fútbol no es más importante que la vida”. Para finalizar solo me queda agregar que no basta con suspender temporalmente el recinto - tal como tardíamente lo ha hecho la municipalidad - ya que el problema persistirá si no es clausurado definitivamente, el club infractor descienda de categoría y sus pseudo dirigentes enjuiciados por ser los principales responsables del los desmanes que continuamente se realizan y de los cuales son cómplices de ello. Que caiga todo el peso de la ley a esta menuda panda de indeseables de una vez por todas. Este crimen no debe quedar impune. El país lo reclama :(