Una grave denuncia dada a conocer a inicios de semana involucra una vez más a Keiko Fujimori con el narcotráfico, lo que confirma la noticia publicada por The Sunday Times sobre sus profundos lazos con los capos de la droga - lo cual fue sospechosamente silenciado por la prensa basura - y que dimos a conocer el pasado 2 de abril. En efecto, la agencia antinarcóticos de Estados Unidos, DEA, admitió que adelanta una investigación de una grabación encubierta en la que Joaquín Rámirez (secretario general de Fuerza Popular, movimiento delincuencial que lidera la hija del genocida, del cual Ramiréz es su principal “financista” y que hoy se encuentra con “licencia” tras el estallido del escándalo) el cual se ufana de haber lavado 15 millones de dólares de la candidata de la mafia. “La declaración de la DEA se produjo luego de que Univisión y el equipo de investigación de América TV del Perú, Cuarto Poder, consultaron con la agencia las declaraciones de un expiloto comercial peruano que asegura haber trabajado para ese organismo”, escribió el periodista Gerardo Reyes, de Univisión. Reyes informó que el expiloto es Jesús F. Vásquez quien que grabó subrepticiamente el comentario del congresista Ramírez en el 2013, como parte de una operación encubierta en Miami. Vásquez contó que “Ramírez de repente estamos conversando y me dice: ‘¿Tú sabes que la china [Keiko] me dio 15 millones de dólares en la campaña anterior para lavarlos, para la campaña electoral del 2011 y yo los lavé a través de una cadena de grifos, de estaciones de combustible?”. El expiloto dijo asimismo que tras escuchar el comentario de Ramírez, que tiene varios grifos, según la investigación fiscal, trató de asegurarse de lo que había dicho. Vásquez cuenta: “Entonces le digo como para verificar: ‘¿La china Keiko Fujimori te dio 15 millones de dólares para que los laves?’ ‘Sí, me dijo, ‘me los dio’. Todo eso se estaba grabando’’. Reyes, cuenta que Vásquez, al escuchar la grabación secreta, un oficial hispano de la policía del condado de Broward, al norte de Miami, que trabajaba en la operación, no pudo ocultar la emoción. “Mi enlace que era el policía José, viene y me dice, esto es bomba, esto es una noticia, es algo formidable”. Pero ¿quien es Joaquín Ramírez, que de cobrador de combi paso a ser millonario? Actualmente es congresista de la República y culminará su mandato en el mes de julio; si bien no fue a la reelección (un dato elocuente sobre la percepción que ya existía meses atrás al interior de FP con respecto a su imagen), su presencia en el movimiento que dirige Keiko Fujimori es importante, según se puede desprender de la férrea defensa que realiza la candidata de la mafia, tras las graves denuncias formuladas en su contra. Ante todo es bueno recordar que Ramírez ya estaba siendo investigado por tráfico de drogas desde hace varios años atrás por la justicia peruana y que esta denuncia de la DEA sólo reafirma las sospechas que recaen sobre él: "Por supuesto, desde los 19 hasta los 20 años fui cobrador de combi. Yo estudiaba en la universidad en las tardes y en las mañanas de todos los días cobraba”, dijo en el 2014, luego de que la entonces procuradora Julia Príncipe lo denunciara ante el Ministerio Público por lavado de activos. Fueron motivo de escrutinio 7 inmuebles y 29 vehículos inscritos a nombre de la compañía Capricornio Import; 25 inmuebles y 5 unidades móviles registradas como propiedad de la empresa Lima Ingeniería y Construcción y 6 inmuebles, inscritos a título de la firma Promotora Inmobiliaria Primavera. Las tres empresas son propiedad del ”financista” de la mafia, y tiene un valor de 7 millones 53 mil 298 dólares. El Ministerio Público considera que la fortuna de Ramírez es sospechosa, ya que el parlamentario asegura que la obtuvo desde que se desempeñó como cobrador de combi. La Procuraduría de Lavado de Activos evidenció asimismo movimientos económicos inusuales en el caso de Joaquín Ramírez: aumentos de capital y adquisición de inmuebles y vehículos a título personal y de empresas inmobiliarias, grifos y clubes de fútbol. Las investigaciones alcanzaron al hermano del congresista, Osías Ramírez Gamarra, electo congresista por el fujimorismo en Cajamarca, y quien aparece como gerente general de la empresa Expreso Turismo Galgos. Osías Ramírez y otros dos familiares directos fueron incluidos en las indagaciones del Ministerio Público en contra de Joaquín Ramírez. Los elementos probatorios presentados por Julia Príncipe permitieron que se llegue a tomar la medida. En su edición del 29 de abril, el semanario “Hildebrandt en sus Trece” dio a conocer que Joaquín Ramírez omitió consignar en la declaración jurada que presentó ante el Congreso, dos millonarias propiedades compradas en Miami, Estados Unidos. Coincidentemente, a los pocos días, el propietario de Ediciones e Impresiones Andina S.A.C.,Fidel Ramírez, tío del congresista, anunció a la editora de la publicación que no podrá brindarle sus servicios, con lo que puso en riesgo la salida a circulación del semanario, lo que fue denunciado por el propio Hildebrandt. Como podéis imaginar, Ramírez cuenta con todo el respaldo de Keiko Fujimori, quien considera que las acusaciones contra su protegido, obedece a “una campaña política”, a pesar de que el hecho de la investigación en su contra por tráfico de drogas tiene varios años en curso. No es de ahora como pretende hacernos creer. Es más, al otorgarle una “licencia” en el cargo de secretario general de la agrupación, solo trata de esconderlo para que no siga afectando más su candidatura y hable sobre las profundas relaciones de Keiko Fujimori y su familia con el narcotráfico. “¿Es suficiente que Ramírez de “un paso al costado” como él ha dicho en su carta de despedida a Keiko Fujimori? No lo creo. Muy tarde la enmienda. Muchas contradicciones. Ha sido muy evidente el deseo de Fujimori por mantenerlo visible en la campaña y defenderlo a como de lugar. Eso no se cambia en dos semanas. El daño, sospecho, ha sido grave y solo podrá ser revertido en los debates. El asunto es que, más importante que la denuncia de Cuarto Poder, se volvieron el eje de la noticia dos temas innegables: 1.-El patrimonio inexplicable de Joaquín Ramírez, y su investigación en Fiscalía por Lavado de Activos, la cual esta paralizada sin poder levantar su inmunidad. 2.- La cerrada defensa de Keiko Fujimori que expectoró a otros por menos. ¿Que le debe a Ramírez para haberlo defendido tanto? Esa es la pregunta que queda en el aire y que la perjudica. La inmunidad parlamentaria se le acaba a Joaquín Ramírez el 28 de agosto. Luego de esta fecha podrá la fiscal terminar su investigación y de ser el caso, acusar. Si se le acusa, el juez debe determinar si hay merito para juicio oral. Pero es ahí donde podría aparecer el ansiado bote salvavidas. Y ese bote sólo es posible si Keiko gana las elecciones. Me explico. Si Ramírez es Ministro tiene el beneficio de antejuicio en un Congreso donde tiene 73 Congresistas. Si la gorda gana, y él es nombrado Ministro (de lo que fuera) su caso no llegará nunca a juicio oral. No saldría jamás del Congreso. Pero si Fujimori pierde, no hay salvación”. explicó por su parte Rosa María Palacios en su blog. Es por ello ineludible propinar una derrota a la candidata de la Korrupción en el ballotage del 5 de junio. De ti depende evitar que el Perú vuelva a convertirse en un narKoestado :(