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sábado, 9 de octubre de 2021

PERÚ: Nada nuevo que ofrecer

Los caviares, aquella manga de parásitos que se dicen de “izquierda” pero que desde la época de Paniagua viven con el dinero del Estado como los ricos que tanto odian - y vacacionan en Miami como los tercermundistas que son, en lugar de hacerlo en sus amadas Cuba, Venezuela o Corea del Norte - se encontraban eufóricos por los últimos acontecimientos que supuso la salida del gabinete del ala radical de Perú Libre, creyendo ahora sí que tendrían todo el poder en sus manos, pero horas más tarde se pudo constatar que en general, los “nuevos integrantes” del gabinete son más de lo mismo y muchos de ellos con serios cuestionamientos como aquellos a los que reemplazaron. En efecto, luego de 69 días, en la tarde del miércoles cayó por fin Guido Bellido, cuyas simpatías por Sendero Luminoso eran por todos conocidos. Un impresentable sujeto que nunca debió de llegar a la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) y que envileció un cargo tan importante, terminó yéndose como correspondía, por la puerta falsa - expectorado con desprecio por Castillo al no serle ya de utilidad alguna y si un estorbo - brindando una patética conferencia de prensa en la más absoluta soledad y contando con el único respaldo del ala más radical de su partido y de su secretario general Vladimir Cerrón, procesado por múltiples cargos de corrupción. Aunque ni siquiera en sus estertores enfundó la lanza de la provocación: “Creo haber desarrollado el cargo con decoro”, afirmó ridículamente, como si alguien pudiera creer en lo que decía aquel momento de su despedida. No se le va a extrañar y ahora será la justicia quien se encargue de él. En su lugar, juró la cuestionada y mediocre expresidenta del Congreso, la comunista Mirtha Vásquez, tenaz defensora del lagarto Vizcarra y acusada de haber alojado en su casa a la terrorista del MRTA Lori Berenson, demostrando con ello su afinidad con las disparatadas ideas y métodos sanguinarios de ese grupo criminal. Radical antiminera y antiinversión, integrante del Frente Amplio y discípula del cura Marco Arana (de amplio prontuario delictivo) Vásquez es incluso más ‘roja’ que el defenestrado Bellido. Perteneciente a la izquierda dura, es una conocida activista ambientalista que se trajo abajo los proyectos mineros de Conga y Tía María, por lo que ya podéis imaginar cual será su labor ahora que estará al frente de la PCM. Además de espantar las inversiones, es partidaria de redactar una nueva constitución, llegando a afirmar que “el primer paso para lograrlo es un referéndum” por lo que en ese sentido está en plena sintonía con Castillo. Ello demuestra que no habrá confianza alguna en su gestión. Para empeorar las cosas, los cambios ocurridos en otros ministerios traen más problemas por sus negros antecedentes, especialmente en las carteras del Interior y Educación, que han sido tomados nada menos que por elementos afines a Sendero Luminoso. Si bien un terrorista convicto y confeso como Iber Maraví alias “camarada Bonifacio” fue apartado del ministerio de Trabajo - por quien Bellido incluso amenazo con presentar una cuestión de confianza para defenderlo frente a lo que parecía su censura inminente - quienes entraron en el gabinete generan gran preocupación. En efecto, entre los “nuevos” rostros hay personajes extremadamente cuestionados, siendo el más resaltante el caso de Luis Barranzuela Vite, un expolicía ungido como nuevo ministro del Interior, pero que se venía desempeñando como abogado de Perú Libre y “asesor” en temas cocaleros del procesado por terrorismo Guillermo Bermejo. Cabe agregar que el pasado fin de semana, Barranzuela se presentó en Pichari (Cuzco) como un “asesor externo” del legislador Bermejo durante el congreso cocalero organizado por este último y azuzo con proclamas subversivas a los productores de hoja de coca: “Háganse sentir, levanten la voz de protesta” dijo la noche del sábado 2 de octubre. “El poder está en el Vraem, no en Lima”, remarcaba una y otra vez. Incluso, anunció que en los próximos días Castillo haría cambios en Devida y que este era un tema de interés de su jefe Bermejo, ya que “es una institución importante. Si hay que refundarlo, se tendrá que hacerlo”, exclamó. También recomendó una auditoría a la institución contra las drogas “para ver cómo es que van a justificar esos millones de dólares que han recibido y que han sido dirigidos para mentirle al Perú” y que Castillo debía anunciar la suspensión de la erradicación de la hoja de coca. Como sabéis, Bermejo promueve un proyecto de ley de la hoja de coca con el propósito de una supuesta industrialización orientada a “beneficiar” a los agricultores, que en realidad fomentara el narcotráfico. Hasta antes de ser nombrado ministro, Barranzuela fungía como abogado de Vladimir Cerrón, de Guido Bellido y del propio partido Perú Libre en la investigación que se les sigue por lavado de activos a partir del caso Los Dinámicos del Centro, representando ello un evidente conflicto de intereses con su posición actual, ya que se sabe que Barranzuela continuara abocado a esta causa ahora que está al frente del Mininter, por lo que se teme que haya filtración de los operativos contra Perú Libre. Pero no es solo ello. La Procuraduría Antidrogas, al Dircote y la Diviac también están en peligro, ya que son organismos que se oponen al plan de gobierno narcoterrorista de Perú Libre y dependen del Mininter .Todavía hay más. A lo largo de su carrera en la Policía (1984- 2011), el “asesor externo” de Bermejo recibió una serie de sanciones disciplinarias que van desde desobediencia, abandono de servicio, negligencia y contra el deber. También ha tenido procesos judiciales por abuso a la autoridad, contra la administración pública y encubrimiento. Venga, por lo visto el tipo es una “joyita” por donde se le mire y debe ser el próximo en ser interpelado y censurado por el Congreso. Al respecto, Pedro Yaranga, experto en temas de narcotráfico, sostuvo que la influencia de Bermejo en los temas cocaleros representa un peligro para la lucha contra el narcotráfico. “Ninguna industrialización (de la hoja de coca) puede competir con el narcotráfico. La muestra más clara que es el ejemplo de Bolivia”, señaló. Explicó que Evo Morales invirtió millones de dólares por 14 años, pero ninguno de los productos ligados a la hoja de coca tuvo aceptación en el mercado y menos en los propios campesinos. Explicó que tras esta supuesta “industrialización”, está el objetivo de oponerse a la erradicación y ponerse a favor del narcotráfico. De igual modo, el exministro del Interior Fernando Rospigliosi sostuvo que haber designado a Barranzuela como titular del sector es un error porque estará en contra de la erradicación y la interdicción de los insumos que van hacia el narcotráfico. “Es inconcebible que ese sujeto se encuentre ahora a la cabeza de la lucha antidrogas en el Perú. Este individuo trabajó con Bermejo, que es favorable al aumento del tráfico de drogas, por lo que ahora, toda la política del régimen estará orientada a favorecer al narcotráfico”, manifestó. Otro ‘error’ de Castillo en esta recomposición sucedió en la cartera de Educación, al remover a Juan Cadillo, asumiendo en su lugar Carlos Gallardo Gómez, nada menos que uno de los representantes de la senderista Federación Nacional de Trabajadores en la Educación del Perú (Fenatep). Así, Castillo cedió a las presiones del nuevo sindicato de maestros que antes se hacían llamar Conare (integrante del Movadef) y que habían puesto en la mira a Cadillo, organismo subversivo que fue legalizado el primer día que ingreso “el camarada Bonifacio” al ministerio de Trabajo. Ellos tienen dentro de sus objetivos tirarse abajo la Ley de Carrera Pública Magisterial y ahora que Sendero controla el ministerio, harán todo lo que sea para lograrlo. Por cierto ¿Qué méritos tiene Gisella Ortiz para ser ministra de Cultura? ¿Acaso sabe de gestión pública cultural o, por lo menos, es una intelectual o artista? Solo se le conoce como familiar de uno de los ocho estudiantes asesinados en julio de 1992 por el Grupo Colina, y aparte de ello nada más. Mejor que esa eterna doliente hubiese continuado en el cargo Ciro Gálvez, que por lo menos hizo algo bueno - quizás lo único que destacar de este régimen - como fue dejar de lado y con las maletas listas a aquellos pseudoescritores caviares que pretendían ser los “invitados” a un evento literario fuera del país - con todo pagado, claro - quienes se creían con derecho a ello tras convertirse en acérrimos defensores de Castillo durante la campaña electoral, pero al verse sorpresivamente desembarcados por Gálvez, cual perros rabiosos se le fueron encima con una desaforada e innoble campaña en diversos medios de comunicación al ver en peligro su no asistencia a reuniones que terminan en orgias de sexo homosexual, alcohol y drogas a lo que son muy adictos, cuando muy bien pueden asistir con dinero proveniente de su propio bolsillo. Pero no, quieren que el Estado les siga pagando sus aberrantes vicios con los impuestos de todos los peruanos. Ahora que Ortiz está a cargo del citado ministerio, de seguro les devolverán sus absurdos privilegios. Se ha llegado a saber últimamente que Ortiz tiene fuertes vínculos con Sendero Luminoso. Si es cierto ese rumor, ahora se comprende su designación. Por otro lado, entre los que conservan el fajín, llama la atención la sobrevivencia del titular de Transportes y Comunicaciones, Juan Francisco Silva, quien desde que asumió el cargo en julio último solo ha hecho noticia por nombrar a un funcionario más descalificado y con peores antecedentes que el anterior, y por cuestionar y pedir cambios en el canal de televisión del Estado -y no del gobierno - porque no lo “tratan” como quisiera. Sin duda el relevo de este ministro era justo y necesario. Un desubicado analista podría decir que Castillo le ha ahorrado al Congreso una de sus dos balas de plata, que una vez utilizados podría ser la excusa esgrimida por el régimen para disolverlo. Pero lamentablemente se trata de una lectura apresurada de los hechos, ya que por otro lado, podría hacer creer que el usurpador que se encuentra en Palacio - y al cual llego por medio del fraude - haya decidido amputar el brazo putrefacto de Cerrón de su régimen. Y como podéis comprobar, este diagnóstico es engañoso. Cambiaron algunas caras, es cierto, pero la intención de Castillo de seguir adelante con sus planes de sacar adelante una nueva constitución de tinte comunista que le permita eternizarse en el cargo e instaurar su “república popular de nueva democracia” siguiendo las enseñanzas de su maestro y guía Abimael Guzmán, continúan firmes. Por ello hay que seguir combatiéndolos sin descanso hasta su derrota final. A no dejarse engañar por quienes siguen teniendo las mismas mañas y pretenden destruir el Perú. Sois gentuza y así los vamos a tratar, como lo que son. A que estáis enterados :)
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