IGLESIA DEL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA: El cielo es el límite
Ubicada en la intersección de la Avenida Antonio José de Sucre y el Jirón 28 de Julio, en el Distrito de Magdalena del Mar, la monumental obra fue concebida por el sacerdote claretiano Simón Llobet. Con una altura que alcanza los 70 metros, posee el título de ser el templo más alto del Perú, ofreciendo una vista panorámica que abarca varios sectores de Lima, incluyendo San Miguel, Magdalena, Pueblo Libre, Jesús María y San Isidro. La obra fue concebida por el claretiano Simón Llobet y desde su inauguración en 1957 se estableció como uno de los símbolos religiosos y arquitectónicos más prominentes de la ciudad. Financiada por donativos y eventos benéficos, este santuario no solo representa un punto de encuentro espiritual, sino también un testimonio vivo de la generosidad de la comunidad para levantar esta impresionante edificación. Este templo católico deslumbra con su arquitectura neorrenacentista, destacando su cúpula coronada por una estatua de la Virgen María, con brazos abiertos. Su fachada conserva los distintivos colores rosados y verdes que la han caracterizado a lo largo del tiempo. El esplendor de la iglesia se revitalizó gracias a trabajos de restauración tanto en su exterior como en su interior del edificio. Las campanas fueron adquiridas gracias a la generosidad de mujeres limeñas a través de donaciones canalizadas por Acción Católica. Estos aportes contribuyeron a mantener viva la esencia y el espíritu de este monumento religioso, consolidándolo como un punto de referencia no solo espiritual, sino también cultural, dentro de la comunidad limeña. Cabe precisar que en sus inicios, la estatua de la Virgen, se había diseñado para ubicarse en la cima de la cúpula. Sin embargo, debido a su peso de más de cuatro toneladas, fue imposible ubicarla en ese lugar. Por ello, permaneció almacenada durante cuarenta años hasta que finalmente fue colocada en 1996 en la plaza homónima, al final de la Avenida Brasil. Fue recién en el año 2004 cuando la congregación adquirió una nueva imagen para la cúpula de la iglesia, diseñada por el escultor arequipeño Fredy Luque, quien fue el encargado de fabricarla. A pesar de mantener las mismas dimensiones que el original, esta fue elaborada con fibra de vidrio y resina, lo que la convierte en una figura mucho más liviana y única en su estilo. Si bien no tiene la larga historia ni el recargado estilo colonial de la Catedral de Lima, la Iglesia del Inmaculado Corazón de María es especial por sí misma. Desde su imponente cúpula hasta su elegante y hermoso interior, es algo completamente único. Y a diferencia de otros templos de Lima, es más una iglesia activa que un museo viviente, con misas diarias y una gran congregación que asiste regularmente, por lo que no es un destino turístico muy popular y a pesar de su imponente tamaño, paradójicamente sigue siendo una joya escondida en Lima. Anímate a conocerla.