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martes, 27 de marzo de 2018

SEMANA SANTA EN EL CUZCO: Fervor religioso en toda su magnitud

A diferencia de lo que se vive en Ayacucho, por ejemplo, la Semana Santa en la ciudad del Cuzco tiene particularidades propias en la conmemoración y celebración en sus diversos templos, donde se recuerda la pasión y muerte de Jesucristo a manos de los judíos, el cual tiene un hondo significado y de mucha reflexión para el pueblo cuzqueño al rendirle sumisión y humildad al “Señor de los Temblores” considerado el Patrón Jurado del Cuzco. Lleva este título desde el año 1650, año en el que según cuentan, la ciudad sufrió un terremoto que se trajo abajo varias casonas e iglesias, pero este finalizó -según refieren - cuando sacaron la imagen de un Cristo Crucificado de la Catedral hacia la Plaza Mayor el cual por cierto no es negro como aparenta ser, ello se debe al humo de los cirios y velas que lo envuelven durante siglos, oscureciéndolo. La fecha de la fiesta es movible, pero normalmente se realiza en marzo o abril. Esta celebración se inicia con el Domingo de Ramos, en el cual se recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén montado en un asno donde es aclamado por la multitud que lo reciben con palmas u hojas de palma en la mano. Haz de saber que las palmas representan el triunfo, la alegría y la victoria, es por ello que en las misas de Domingo de Ramos que se realizan desde muy temprano, los fieles acuden portando éstas palmas a la Basílica Catedral del Cuzco, donde aproximadamente a las nueve de la mañana, se realiza la tradicional “Bendición de Ramos” y una celebración eucarística para conmemorar tal acontecimiento. Estas palmas bendecidas luego serán colocadas en cada casa como símbolo de protección. Sin embargo, es el Lunes Santo, que está considerado como el día de mayor importancia por la magnitud de la celebridad, ya que está dedicado al “Señor de los Temblores” , en el que unos 60 mil feligreses se congregan en la Plaza Mayor para acompañar en todo el recorrido de la tradicional procesión, y posteriormente recibir la bendición. Este se inicia desde muy temprano con solemnes misas de comunión en diferentes horarios a partir de las 05.45 a.m. y la Homilía del Arzobispo de Cuzco a la 13.30 p.m. La procesión inicia a las 2 de la tarde, ante los repiques de las campanas de la Catedral y de la Compañía de Jesús, para recorrer las calles principales del centro histórico de la ciudad adornadas con alfombras de flores. A su paso por las diferentes calles de la antigua capital de los Incas, el Patrón Jurado de Cuzco es recibido por las familias e instituciones, quienes desde sus balcones expresan su veneración con interminables lluvias de una flor nativa de color rojo que simboliza la sangre que derramó Cristo en su pasión. Por lo general, el recorrido se inicia en la Plaza Mayor, y luego se dirige por la calle Plateros hasta a la iglesia Santa Teresa, en la cual permanece por 20 minutos para el cambio de sudario, luego continúa por la plaza de San Francisco y Espinar, en esta última se encuentra la iglesia de La Merced. Por último la imagen regresa a la Plaza Mayor por la calle Mantas, ingresando a la catedral, para luego dar su bendición a miles de feligreses y curiosos que se aglutinan en la plaza. En su anda predomina el color rojo, según la historia que los antiguos cuzqueños emplearon éstas flores para derramar y esparcir al Señor de los Temblores la misma que era recogida por niños y mujeres en grandes cantidades para luego ser transformados en hermosos arreglos florales que son colocados en las diferentes cantoneras del anda a modo de ofrenda. Hoy en cambio, lo hacen personalidades conocidas y diferentes instituciones. Aproximadamente a las 7 de la noche, la imagen da su esperada bendición a todo el pueblo cuzqueño entre tañidos de las campanas de la Catedral y la Compañía, que ensordecen, a la multitud, mientras la gente llora, se emociona, grita y entre sollozos y lágrimas el Señor de los Temblores lentamente desaparece entre las puertas de la Catedral, despidiéndose hasta el próximo año. El martes Santo, se realiza misas solemnes con asistencia de todo el presbiterio. Por otro lado, el Jueves Santo, es el día de las misas de la “Institución y del Sacerdocio” con procesión hacia el monumento (Templo de la Sagrada Familia). A su turno, el Viernes Santo, es la Celebración de la Pasión del Señor a las tres de la tarde, con la Procesión del Señor del Santo Sepulcro. (Basílica de la Merced) a las cinco. Es muy peculiar que muchos fieles el Viernes Santo salen muy de madrugada y realizan un “Vía Crucis” desde la plaza San Francisco hasta la Cruz del Papa, ubicada en la Fortaleza de Saqsayhuaman, que domina la ciudad. Acto seguido, algunos padres de familia a su regreso, azotan a sus hijos, antes de que se levanten de la cama, como señal de adhesión al sufrimiento de Jesús. Durante el Viernes Santo, algunas familias aún conservan la tradición de los 12 platos que consiste en preparar 12 platillos típicos basados en carne de pescado generalmente. El Sábado Santo se realiza la celebración de la solemne vigilia pascual; mientras que el Domingo de Resurrección desde la mañana, en todas las iglesias se celebran misas y procesiones del Cristo resucitado, con los cuales se cierran las celebraciones de Semana Santa. Como podéis imaginaros, la ciudad del Cuzco cuenta con una innumerable cantidad de festividades y es la Semana Santa una de las que vale la pena conocer :)
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