TV EN VIVO

jueves, 7 de noviembre de 2019

LA RANA GIGANTE DEL TITICACA: Protagonista de la nueva moneda de 1 sol

El Banco Central de Reserva del Perú puso en circulación esta semana la décima y última moneda de la Serie Numismática “Fauna Silvestre Amenazada del Perú” alusiva en esta ocasión a la Rana Gigante del Titicaca, el anfibio más emblemático del altiplano. En el anverso, en la parte central, se observa el Escudo de Armas del Perú rodeado de la leyenda “Banco Central de Reserva del Perú”, el año de acuñación 2019 y un polígono inscrito de ocho lados que forma el filete de la moneda. En el reverso, en la parte central se observa una composición con la imagen de la Rana Gigante del Titicaca. También se aprecia un diseño geométrico de líneas verticales, la marca de la Casa Nacional de Moneda, así como el nombre científico de la rana: Telmatobius culeus, la denominación en número y el nombre de la unidad monetaria 1 Sol. Al lado de la denominación se aprecia círculos concéntricos con un colibrí calado, como símbolo de la serie. En la parte superior está la frase Rana gigante del Titicaca. “Esta moneda es de curso legal, por lo que puede ser usada en cualquier transacción económica y circulará de forma simultánea con las actuales”, subrayó el ente emisor. La Rana Gigante del Titicaca es una especie única en el mundo, catalogado por primera vez por el oceanógrafo francés Jacques Cousteau en 1969 y se encuentra en peligro de extinción, ya que está muriendo de forma colectiva debido a la contaminación provocada por los masivos vertidos en las riberas del lago. Como sabéis, este lago - compartido con Bolivia - considerado el más alto del mundo al estar a casi 4.000 metros sobre el nivel del mar, recibe residuos hospitalarios, industriales, mineros y sustancias líquidas procedentes de los vertederos urbanos que fluyen a diario a la cuenca del lago, cuyas aguas han adquirido por ello un tono verdoso y una textura aceitosa, a lo que se suma el mal olor, afectando tanto a la flora como a los animales que la habitan. Cuando se dio a conocer la existencia de la rana, los expertos calculaban que en el Titicaca vivían 1.000 millones de ejemplares de esta especie. En el 2002, un estudio internacional indicó que su población se situaba, dependiendo de la época del año, entre los 17 y 51 millones de individuos. La captura masiva -destinada al consumo humano-, la contaminación del agua y diversas enfermedades han reducido drásticamente la población de esta especie única del Titicaca y desde el 2016 la Lista Roja de Especies que elabora la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) la considera en “peligro crítico” Según las evaluaciones del estado poblacional realizadas en el Lago Menor del Titicaca, se estima que entre 1999 y 2008 hubo una pérdida del 39 % de la población, y la evaluación de riesgo de extinción de la Lista Roja de la UICN para esta especie, indica que la población del lago Titicaca habría sufrido una severa declinación, estimada en más del 80% de la población en tres generaciones. Diversas iniciativas internacionales intentan desde hace años identificar y poner remedio a las causas de la crisis en la población de esta singular especie, pese a lo cual se mantiene la preocupación científica sobre su futuro. La rana Telmatobius culeus pertenece a la familia Telmatobiidae y es endémica de la cuenca del lago Titicaca. Su cabeza es redondeada frontalmente, y su principal característica es la piel; con grandes pliegues que facilitan la absorción de oxígeno, una característica que se observa también en otros anfibios estrictamente acuáticos. Los expertos señalan que debido al serio deterioro del frágil ecosistema del lago, el daño causado a la rana es irreparable y su desaparición es sólo cuestión de tiempo :(
Creative Commons License
Esta obra está bajo una Licencia de Creative Commons.