Han debido de pasar décadas para que Lima tenga un sistema de transporte rápido y seguro que pueda trasladar a miles de usuarios de un lado a otro de la ciudad en el menor tiempo posible. Se trata de un sueño largamente esperado por millones de limeños que a diario sufren el caos generalizado en las transitadas calles y avenidas de una urbe que por su tamaño e importancia, era inconcebible que hasta el día de hoy –
por razones políticas – careciera de un metro, ya que quienes gobernaban lo consideraban demagógicamente
(demostrando su ignorancia en ello) “como algo superfluo cuando hay otras necesidades mas urgentes por hacer” (?) permitiendo que el problema del transporte urbano se agigante con el paso de los años, a tal punto que hoy en determinadas horas es imposible circular debido a la gran cantidad de vehículos que encontramos a cada paso. Si a ello agregamos las miles de chatarras chinas y coreanas –
importadas desde la época de Fujimori quien fue el que lo autorizó - para quienes las leyes de transito son cosa muerta y hacen lo que quieren en las calles de Lima, ya se pueden imaginar lo que se siente el estar horas de horas atrapado dentro de tu vehiculo sin poder avanzar ni retroceder. El tráfico en Lima es el más endemoniado del mundo y algo había que hacer para acabar con este martirio.
Si bien el bufón aprista Alan García inicio la construcción del llamado Tren Eléctrico en su gobierno ese fue abandonado por quienes lo sucedieron y debieron de pasar años para que una vez vuelto al poder, concluyera siquiera la primera etapa. Pero este no es el “Metro” que algunos quisieron hacernos creer, suplemente te es un tren urbano obsoleto (que progresivamente está siendo reemplazado por otras unidades mas modernas como el que ilustra nuestra nota) que se moviliza a través de una vía elevada por zonas marginales de Lima y que ni siquiera llega al centro de la ciudad. Por el contrario un verdadero Metro es subterráneo que se desliza a gran velocidad por extensos túneles por debajo de la urbe, construidos para tal fin. Si bien su costo es elevadísimo, cada año que pasa este se incrementa aun más. Es por ello que no podemos seguir esperando para construirlo, más aun con el colapso del transporte en Lima. Es por ello digno de resaltar una buena noticia dada a conocer el último fin de semana la cual informa que el tan esperado Metro de Lima -
el original - por fin será una realidad. En efecto, en un hecho sin precedentes, el Gobierno del Presidente Ollanta Humala - a través de Proinversión - adjudicó la concesión e la Línea 2 del Metro de Lima al Consorcio Nuevo Metro de Lima (conformada por empresas españolas e italianas, más la peruana Cosapi) la cual será la obra más grande en la historia del país. La faraónica construcción, como especificó el ministro de Transportes y Comunicaciones, Carlos Paredes, unirá Ate y Callao a través de un tren subterráneo en un tiempo hasta ahora impensable: 45 minutos. No es para menos. Se trata del primer tren subterráneo del país, para cuya construcción se necesitará de maquinarias que caven 25 metros bajo tierra. La realización del ambicioso proyecto, de 35 kilómetros de extensión
(con 27 modernas estaciones al nivel que encontramos en Londres y Madrid) que incluye un ramal de 8 kilómetros al aeropuerto Jorge Chávez, se iniciaría los primeros días de mayo. El Consorcio Nuevo Metro de Lima deberá invertir $6620 millones en la edificación de este sistema de transporte y en la adquisición de los trenes. A cambio, se le entregará la operación por 35 años. Según el ministro de Transportes y Comunicaciones, la obra es "un paso adelante en la mejora de la calidad de vida de los pobladores de Lima y Callao", quienes se verán beneficiados y podrán transportarse de manera más rápida y segura. Al tratarse de una obra subterránea, informó el MTC, el tiempo de construcción se reducirá, liberando por completo los espacios para mejorar la circulación vehicular. El MTC refirió además que la Línea 2 atravesaría 13 distritos de Lima y Callao en solo 45 minutos, a diferencia de hoy en día, en que hacer ese recorrido demora más de dos horas. Esta vía, además, podrá conectarse con la denominada Línea 1 (El tren Eléctrico que une Villa El Salvador-San Juan de Lurigancho) y con El Metropolitano.
Al respecto, la alcaldesa de Lima, Susana Villaran, coincidió con la explicación del ministro y expresó que la obra es la verdadera reforma del transporte en la capital: "No existe una ciudad latinoamericana moderna que no cuente con metros subterráneos, excepto Bogotá, que ya sufre grandes problemas con su sistema de buses obsoletos", anotó. Esperemos verlo pronto en funcionamiento, ya que Lima lo merece: Y es solo el primer paso ...