En lo que puede considerar como un operativo psicosocial propio de la dictadura fujimorista, en estos días los peruanos están siendo testigos de nauseabundo espectáculo montado por la mafia de la mano con la prensa basura, con el objetivo de desviar la atención pública de temas realmente importantes como la lucha contra la corrupción, los intentos del fujimorismo de expedir leyes con nombre propio aprovechando su mayoría en el Congreso, tratando de evitar por ejemplo que se debata públicamente el Tratado Transpacífico (TPP) lesivo a los intereses del Perú o de que se siga hablando de las profundas conexiones de Keiko Fujimori con el narcotráfico, y que mejor manera de hacerlo que revivir fantasmas del pasado, como Sendero Luminoso, que hoy virtualmente no existe y cuyos rezagos sobreviven dispersos en la selva del VRAE dedicados al narcotráfico, donde son combatidos tanto por el ejercito como por la policía. No es de extrañar que esos mismos medios y pseudoperiodistas que se vendieron vilmente a la dictadura sean los mismos que hoy dedican vomitivos reportajes (como el que mostramos al final de la nota) tratando de asustar a los incautos con el cuento de que el terrorismo ‘esta de vuelta’ cuando no hay nada de cierto en ello. Al respecto Gustavo Gorriti, quien es un profundo conocedor del tema, escribió esta semana un interesante articulo que he decidido reproducirlo - entrecomillado claro está - y con el cual mayormente estoy de acuerdo ¿vale?: “El pasado 12 de septiembre se cumplieron 24 años de la captura de Abimael Guzmán, el líder supremo de Sendero Luminoso. Fue la estocada fulgurante con la que un grupo pequeño y eficaz de policías, el GEIN, cambió en un momento la suerte de la guerra y convirtió un erosivo y sangriento empate estratégico en la brusca realidad de victoria. Lo que es la vida. Abimael Guzmán recibió la fecha en la prisión de alta seguridad de la Base Naval del Callao. Su esposa, Elena Iparraguirre, número dos de la organización senderista en el momento de la captura, la pasó en el penal de Piedras Gordas. El creador y jefe del GEIN, el coronel en retiro de la Policía Benedicto Jiménez, estaba cerca, preso también - por otras circunstancias - en el mismo penal de Piedras Gordas. Asimismo, los cobardes que sin haber jugado ningún papel en la captura del líder senderista, pero que pretendieron aprovecharse de ello para detentar el poder dictatorial - Kenyo Fujimori y su siniestro asesor, Vladimiro Montesinos - también pasaron la fecha recluidos en las cárceles que los alojan desde hace ya varios años: Montesinos en la Base Naval del Callao (a pocos metros de Guzmán); y Fujimori en la cárcel unipersonal que le adaptaron en la base de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía (DIROES). Protagonistas de la época más oscura de este país, el destino se encargó de colocar a cada uno en su lugar. Así es el Perú, inagotablemente paradojal y claramente no kantiano. La historia de los años trágicos de la insurrección senderista y del momento decisivo de la victoria debe componerse - literalmente encarcelada - entre las rejas. Creemos saber que cuanto más inesperada sea una parábola, más rica y variada será su moraleja. Pero si ese fuera el caso, Perú debería tener una de las clases dirigentes más sofisticadas del mundo, surfista virtuosa de la sorpresa, a la que no hay ola histórica o corriente del día que sorprenda y que no se pueda aprovechar. Pero, y mejor decirlo sumariamente, es una de las clases dirigentes más superficiales, histéricas y brutas cuando se la compara con su circunstancia. ¿Cómo una realidad tan rica puede producir una panda de impresentables - mediocres en grado sumo - tan entupida y de mente muy estrecha? Hace 24 años, el destino, encarnado en el GEIN, le dio al país una victoria inesperada. Para Abimael Guzmán y sus seguidores, su captura no solo significó la derrota de la insurrección senderista (dado el papel virtualmente religioso que le conferían sus huestes al líder, a quien, entre otras cosas, llamaron el Puka Inti, el Sol Rojo), sino de la Revolución Mundial, de la que ellos, los senderistas, se consideraban ‘portaestandartes’. Sin Guzmán, concluyeron, ni la una ni la otra eran posibles. Las leyes de la dialéctica quedaban, si no derogadas, sumidas en una indefinida latencia estratégica. Por ese peculiar razonamiento, Abimael Guzmán entró en conversaciones con Vladimiro Montesinos pocos meses después de su captura. El entonces muy poderoso ‘asesor’ de Fujimori le regaló una torta de chocolate, canciones de Frank Sinatra y comodidades penitenciarias temporales. A cambio, Guzmán, rodeado por su encarcelado Estado Mayor, leyó una carta en la que virtualmente reconocía su derrota y pedía desarrollar conversaciones de paz. La carta fue utilizada propagandisticamente para afianzar el régimen criminal de Fujimori. Luego de eso, las conversaciones terminaron y los presos regresaron a sus celdas en las que casi un cuarto de siglo se les acumuló en las espaldas. En esa larga marcha al campo geriátrico, Sendero mantuvo una cierta consistencia organizativa pese a su radical cambio de línea. En los Gobiernos democráticos a partir del año 2000 pidieron discutir lo que ellos llamaron “problemas derivados de la guerra”, que una vez despojados del eslogan significaban algunas mejoras del rigor penal para sus líderes y la posibilidad de participar en la vida política del país. Lo inteligente para el Estado peruano - que tenía casi todas las bazas en la mano - hubiera sido exigir a los líderes senderistas la declaración explícita de derrota y la consecuente, igualmente explícita, rendición; la petición de perdón a sus miles de víctimas; la renuncia perpetua a la vía de las armas; y la declaración de lealtad, también perpetua, a la democracia. En contrapartida, podría haber mejora en las condiciones penales de los líderes condenados a prisión de por vida; y la participación, justificadamente vigilada por los servicios de seguridad, en la legalidad política. Esto hubiera significado riesgos menores a cambio del objetivo mayor: la paz. La paz es muy diferente a la sensación de tregua prolongada, de crispación y sospecha que existe ahora. ¿Por qué no se dio entonces, por qué no se da ahora? Por las respuestas estridentes en contra, sobre todo de la clase dirigente descrita líneas arriba, para los cuales la única acción posible es cerrar la reja y tirar la llave al pozo. El último capítulo de histeria recurrente fue cuando la fiscal que logró la cadena perpetua contra Guzmán entregó a sus deudos los restos de senderistas muertos en un motín carcelario, sangrientamente debelado por Alan García, en junio de 1986, conocida como la masacre de El Frontón. El pequeño cortejo de familiares y simpatizantes senderistas los llevó a un cementerio apartado en una zona marginal de Lima, en un conjunto cerrado de nichos que varios medios de prensa llamaron pomposamente ‘mausoleo’ (?), y los enterraron con algunos cantos y antorchas, ninguno de los cuales proclamaba la violencia. Eso sucedió en junio, pero un vídeo de inteligencia sospechosamente se filtró en septiembre (el mismo día en que se organizo una marcha contra la decisión de reducir el sueldo mínimo a los trabajadores, por presión de los empresarios, una medida que tiene tanto el apoyo del gobierno como del fujimorismo) por lo que se puede deducir perfectamente que la publicación de dicho entierro por un inmundo pasquín de la mafia, tenia el propósito de acallar las protestas. Como era de esperar, la grita se desató y todos los funcionarios de este gobierno de mediocres, entrevistados por la prensa basura compitieron histéricamente entre sí para ver quién sonaba más rudo e implacable. Hasta el mismo Kuczynski, desubicado como siempre y que acababa de retornar de China, donde rindió repetido homenaje al Gobierno y su partido (que, si no me equivoco, sigue llamándose el Partido Comunista), declaró que el mausoleo “debía desaparecer”, aunque dijo que antes los cadáveres deben ser retirados “con mucho respeto”. La declaración de Kuczynski fue hecha, paradójicamente, poco antes de viajar a Colombia para acompañar al presidente Santos en la firma del acuerdo de paz con la guerrilla de la FARC, que se firmó esta semana. Ahí, Santos le pudo contar que es mucho más difícil y también más valeroso, hacer la paz que la guerra, incluso cuando aquella corona la victoria” puntualiza la nota. Un acuerdo que por cierto - agrego yo - ha despertado los odios mas profundos de una derecha retrograda y cavernaria en el continente, que ve con horror como mediante el dialogo se pueden llegar a soluciones satisfactorias para todos, menos para los traficantes de armas y aquellos que ya no van a poder seguir viviendo del cuento. En el caso del Perú, la rabia desbocada de la mafia homicida ha quedado patente con el papelón protagonizado por Rafael Rey a quien le enrostraron como Fujimori vendió armas a la FARC ¿No decían que no negociaban con ‘terroristas’?. En relación con Sendero ¿no se dan cuenta que con esa campaña mediática en los medios le están haciendo un gran favor a quienes son una sombra de lo que fueron? Venga ya, nadie en su sano juicio puede defender o siquiera justificar lo realizado por ese grupo criminal en los llamados años del horror, pero sobredimensionar su presencia en estos tiempos por razones políticas es francamente repugnante :(
Todo tiene su final y el Banco Central de Reserva (BCR) ha presentado este jueves la nueva moneda de un sol, alusiva al Arco Parabólico de Tacna, con el cual pone punto final a una serie numismática iniciada en el 2010. En el anverso, se observa en el centro el Escudo de Armas del Perú, rodeado de la leyenda: “Banco Central de Reserva del Perú”; el año de acuñación: 2016, y un polígono inscrito de ocho lados que forma el filete, mientras que en el reverso, en la parte central, se aprecia una composición del arco parabólico y la catedral de Tacna, así como la marca de la Casa Nacional de Moneda sobre un diseño geométrico de líneas verticales, y la denominación en número y en nombre de la unidad monetaria encima de unas líneas ondulantes. Además, en la parte superior se muestra la frase: arco parabólico de Tacna con el año de su construcción, 1959. Esta moneda puede ser usada en cualquier transacción económica y circulará de forma simultánea con las actuales. Como sabéis, el llamado Arco Parabólico es un monumento ubicado en el Centro Cívico de la ciudad de Tacna, que fue inaugurado el 28 de agosto de 1959 durante el gobierno de Manuel Prado Ugarteche con el nombre de Monumento A los Héroes. Su altura es de 18m y construido en piedra de cantería. Fue diseñado por técnicos alemanes y su forma corresponde a la forma del paseo cívico de Tacna. En su base se encuentra las figuras de Miguel Grau Seminario y Francisco Bolognesi, héroes peruanos de la infausta Guerra del Pacífico. Más adelante, tras bajar algunas gradas, se halla un candil de bronce con diseños de anclas y espadas en alto relieve, los cuales representan al Ejército y a la Marina de Guerra del Perú. Cada domingo, una antorcha se enciende en una ceremonia con un juramento expresando: “Mi coronel Bolognesi, tenemos deberes sagrados que cumplir y los cumpliremos hasta quemar el último cartucho”. El Arco Parabólico de Tacna guarda un significado especial para los peruanos ya que simboliza el respeto que la población rinde a sus héroes nacionales, quienes dieron su vida para salvaguardar la soberanía peruana. “Han pasado seis años desde que acuñamos la primera moneda, el Tumi de Oro, y seguimos sorprendidos por la acogida”, comenta Abraham de la Melena, funcionario del BCR quien desde marzo del 2010 integra el equipo que decide los diseños. Como recordareis, ‘Riqueza y Orgullo del Perú’ está compuesta por 26 monedas de S/1, acuñadas en un cospel (disco con borde) de alpaca, aleación de cobre, níquel y zinc. La moneda que cierra la colección se emitió justo un mes después de haberse celebrado el aniversario 87 de la reincorporación de Tacna al Perú, hecho ocurrido el 28 de agosto de 1929. De acuerdo con Pedro de la Puente, de la Sociedad Numismática del Perú, antes de la emisión de ‘Riqueza y Orgullo del Perú’, lo habitual era encontrar a ciudadanos que coleccionaban monedas conmemorativas. Dichas piezas, avaluadas entre los S/124 y S/567, son acuñadas desde 1954 en oro y plata. “Con esta serie en la que cada moneda nueva cuesta su valor nominal, se despertó el interés por la numismática en personas ajenas a ella. Además, con los álbumes y cromos de la colección se alimentó el interés por el acervo cultural representado en las monedas”, afirma. Según registros periodísticos, este repentino afán por la numismática provocó que, para noviembre del 2010, la moneda del Tumi de Oro se ofertara en S/5, mientras que el ejemplar en su estuche de colección - que el BCR distribuyó por S/2 ni bien lanzó la moneda, tal como hace hoy con la moneda de Tacna - costase S/10. Hoy, cada una de estas monedas se oferta en Internet y locales del Centro de Lima por S/25, S/50 y S/70 (US$21,08). Según el BCR, hasta el 14 de julio pasado, cuando salió la moneda alusiva a la cerámica shipibo-konibo, se habían emitido en total 266 millones de piezas de la serie. De ellas, más de 120 millones habrían salido de circulación gracias a los coleccionistas. “Conservar estas monedas también es una forma de inversión, ya que son pequeñas obras de arte. La moneda de Huaytará, por ejemplo, fue nombrada La Mejor de Curso Legal del Mundo, en el 2015. Y la de Petroglifos de Pusharo fue La Más Bonita del 2015 para la Sociedad Numismática de Argentina”, explica De la Melena. Cada diseño de Riqueza y Orgullo demandó la colaboración de historiadores y arquitectos. Ellos asesoraron a Eduardo Paredes y Felipe Escalante, diseñador industrial y grabador del BCR, respectivamente, para dibujar y modelar las piezas en la planta ubicada en la Casa de la Moneda. “Tardamos de dos a tres meses en cada moneda porque a veces íbamos hasta el lugar donde está el motivo”, recuerda Paredes, cuya pieza preferida es la de Huarautambo, en Pasco. Según se supo, el BCR evalúa emitir una nueva serie numismática, alusiva en esta ocasión al bicentenario de la Independencia. De confirmarse ello, coleccionistas: prepárense :)
Una serie fotográfica del Perú publicada esta semana en la revista especializada en turismo Voyages del diario estadounidense The New York Times, nos muestran en todo su esplendor a las ciudadelas de Machu Picchu y Choquequirao, así como el Camino Inca en el Cuzco. Para ello el fotógrafo español Sebastián Liste llegó al Perú y durante siete días registró el recorrido desde Cachora a Machu Picchu, experiencia que fue plasmada en una crónica publicada junto a otros destinos del mundo. Él expresa que desde pequeño pudo ver imágenes de la famosa ciudadela Inca, fotografías tomadas por su abuelo, lo que lo inspiró a que más adelante pueda decidirse por la profesión de fotógrafo. “Mi familia viene de Uruguay, y mi abuelo era un arquitecto que desarrolló las comunidades urbanas de América Latina. Él era un fotógrafo aficionado, recuerdo que, al crecer, mi abuela me mostró todas estas diapositivas de sus viajes, incluyendo a Machu Picchu , en cajas de luz. Esto es el por qué quise ser fotógrafo. Ir a Machu Picchu se sentía como una peregrinación, de alguna manera conectado por mi familia, pero también por mí. La caminata te da una idea de lo grande que el Imperio Inca fue, es increíble ver un pedazo de esta gran civilización. Ellos se las arreglaron para producir cultivos en diferentes altitudes y climas diferentes y construir estos pueblos. Todos los senderos y caminos alrededor de los Andes Inca fueron construidos para llegar a Machu Picchu . Durante siete días no vimos una ducha, una moto, un avión, un teléfono celular, acabamos de ver la naturaleza.Hacia la mitad de la caminata, había unos baños termales provenientes de las montañas, los ríos son muy fríos, como la nieve y tienes que conseguir la ropa adecuada para muchos climas diferentes, hace mucho frío por la noche, y es muy caliente en el día.Traté de tomar fotografías sin pensar mucho, sin embargo, era difícil respirar en esta altitud, el cerebro no está pensando correctamente. Fotografíe en blanco y negro como un homenaje a un peruano llamado Martín Chambi, un fotógrafo indígena que registró todos los Andes en la mitad del siglo XX. Traté de plasmar lo que hizo” indicó. Cabe destacar que la presencia del Perú en este medio es muy importante, dado que ayudaría a incrementar el número de visitantes y llegar a la meta de los 7 millones de turistas en 5 años :)