Una noticia dada conocer esta semana por el folklórico “abogado” del despreciable Genocida Kenyo Fujimori –
condenado a 25 años de prisión por Crímenes de Lesa Humanidad - en el sentido de que su defendido “no recibe ni un centavo ”, por lo que pidió a organizaciones de Derechos Humanos que lo ayuden a gestionarle una pensión, “porque solo vive del dinero que le dan sus hijos”, ha generado toda clase de burlas en la red, ya que todos se preguntan
¿y que fue de los miles de millones de dólares que este delincuente robo al Estado - producto de las ilegales privatizaciones de las empresas publicas - las cuales transformadas en barras de oro, fueron enviadas en la valija diplomática al Japón , y de las cuales no se tienen noticias hasta el día de hoy? ¿Ya se le acabó toda esa fortuna mal habida, dilapidada por sus engendros o lo tiene a buen recaudo en paraísos fiscales, pero al estar entre rejas le es imposible acceder a ellos?. En efecto, en el colmo del cinismo, William Castillo, el impresentable defensor del reo, expresó que su cliente tiene derecho a ello, “Implorando a las organizaciones de Derechos Humanos que me ayuden a reclamar su pensión”, anunciando que en el próximos días comenzará a gestionar este beneficio porque “el Estado en forma cruel y mísera se la niega, pese a que fue rector de la Universidad Agraria de La Molina, catedrático de dicha casa de estudios y jefe de Estado por más de 10 años” vocifero el susodicho.
¿Así que el pobrecito no tiene un sol? A otro con ese cuento. Lo cierto es que Fujimori saqueo a su gusto las Arcas Públicas, robando a manos llenas, el y esa banda de mal nacidos que se hicieron con el poder tras el incruento autogolpe de 1992. Al respecto, el ex procurador anticorrupción Julio Arbizu, aseguró que el dinero saqueado del país durante ese régimen asesino bordearía los 7 mil millones de dólares, y los lugares donde se encuentran depositados aún no ha sido identificados plenamente, debido principalmente al desinterés que tuvo el pasado gobierno de Alan García que por su alianza con el fujimorismo, diezmó a los órganos correspondientes que debían encargarse de ese trabajo.
“Hubo una etapa proactiva de repatriación de parte de la Procuraduría y el Ministerio Público desde el 2001 al 2004, de Estados Unidos, de Suiza y el Gran Caimán, sin embargo, desde 2005, en el segundo gobierno de Alan García, esa actividad decayó absolutamente, porque no existió una voluntad política para hacerlo” expresó. El ex-procurador lamentó así que en el último gobierno de García en la debilitada Procuraduría Anticorrupción solo estaban destinados seis abogados para todos los casos referidos a la repatriación y que no había, por tanto, un equipo dedicado exclusivamente a hacer seguimiento a las cuentas de los ladrones. Y eso sumado al nulo apoyo político de la mafia criminal aprofujimorista para ese fin.” Con la llegada al poder del Presidente Humala existe un renovado interés es recuperar los miles de millones sustraídos por esa banda delincuencial, pero el trabajo es tedioso, debido a su ocultamiento en paraísos fiscales y tomara tiempo recuperar lo robado” reiteró. Por su parte, Ronald Gamarra, exprocurador ad hoc para los casos Fujimori y Montesinos, ratificó el saqueo de las arcas del Estado en tiempos de Fujimori luego de las ventas entre 1992 y 1999 de mas de 220 empresas públicas como CPT, Electrolima, Solgas, Hierro Perú, Aeroperú, Centromin Perú, entre otras:
“La información que brindó el Ministerio de Economía es que la venta de estas empresas alcanzaron los 7 mil millones de dólares. Y tras la caída del régimen de Fujimori solo quedaban en las arcas del Estado $500 millones, que en lo precipitado de su huida no se lo pudo llevar consigo. El resto se evaporó” aseguró.. Sin embargo, esa cifra quedaría corta con la información que brindó la Comisión Investigadora sobre Delitos Económicos y Financieros (CIDEF) del Parlamento que investigó el proceso de privatización luego de la fuga de Fujimori y que certificó que se pagó al Estado un total de US$ 9,200 millones de dólares por la venta de estas empresas.• De ello solo apenas se pudo recuperar hasta ahora durante el gobierno del Presidente Humala, unos 200 millones de los miles de millones que robo Fujimori y su banda” aseveró. Es por ello necesario no solo redoblar todos los esfuerzos posibles para repatriar esa fortuna, sino también de juzgar y condenar a los hijos del genocida, los cuales no tienen oficio ni beneficio, pero que dilapidan alegremente el dinero robado a todos los peruanos. A la cárcel con todos ellos :)