Mientras la clase política peruana en su conjunto se debate en una grave crisis , producto de innumerables escándalos de corrupción que los han desacreditado completamente ante la opinión pública, un caricaturesco personaje (que se define a si mismo como un ‘antisistema’) busca sacar provecho de ello y no oculta sus intenciones de presentarse como candidato en las próximas elecciones generales, que se espera sea en el 2021, si es que antes el Congreso no decide expectorar al actual inquilino de Palacio, un pobre diablo cuya debilidad y total dependencia del Legislativo esta a la vista de todos. Nos referimos al autodenominado líder ‘etnocacerista’ Antauro Humala, quien cumple una condena de 19 años de prisión por dirigir un motín en el 2005 y desde entonces busca afanosamente la reducción de su pena para salir en libertad. De carácter explosivo e ideas delirantes, es un indigenista radical con un odio marcado a todo lo que sea especialmente chileno y español, a quienes acusa de todos los males que agobian al Perú y cuyas peligrosas ideas por mas absurdas que pudieran parecer, han logrado calar en los sectores mas deprimidos y manipulables de la sociedad: los indígenas de las regiones olvidadas del Perú, convertido en caldo de cultivo de estos grupos extremistas que se aprovechan de su situación y utilizarlos para su beneficio, tal como sucedió en la época del terrorismo. Su fanatismo extremo lo llevo a realizar en octubre del año 2000, junto a su hermano menor Ollanta Humala y 69 reservistas del ejercito, el asalto a una instalación minera en Locumba (Tacna) para exigir la renuncia del dictador Kenyo Fujimori, como consecuencia del estallido del escándalo de los ‘Vladivideos’, que desnudo la podredumbre de su régimen criminal. Curiosamente ese mismo día, su siniestro asesor Vladimiro Montesinos fugaba del país a bordo del velero Karisma. Tras el fracaso de la intentona y la caída de la dictadura fujimorista, el gobierno provisional de Valentín Paniagua indulto a los alzados en armas. El 1 de enero del 2005, a dos días del pase a retiro de su hermano Ollanta, protagonizó un nuevo motín denominado el Andahuaylazo, esta vez contra Alejandro Toledo, en la ciudad de Andahuaylas. Antauro asaltó una comisaría con un grupo de hombres armados y pretendió la renuncia del cholo borracho y fumón, así como la restitución de la Constitución de 1979. Durante su asalto murieron cuatro policías y dos de sus reservistas. Tras su rendición, fue juzgado y recibió en el 2009 una condena de 19 años de prisión. Cuando su hermano Ollanta - quien asumió posiciones mas moderadas - logro llegar a la Presidencia de la República tras ganar las elecciones del 2011, Antauro pensó que iba a ser liberado, pero al no ocurrir aquello y preso de la furia, lo considero desde entonces como un ‘traidor’ al ‘etnocacerismo’. Esta es una doctrina política caracterizada por un nacionalismo etnocéntrico e irredentista que evoca tanto el poderío y la identidad del Imperio Inca, así como el nacionalismo de las fuerzas armadas peruanas de la época republicana. Esta ideología fue esbozada por su padre, Isaac Humala - conocido en el pasado por su militancia marxista en el Partido Comunista Peruano y otros grupúsculos de extrema izquierda - y donde la mayoría de sus integrantes son reservistas del Ejército peruano y veteranos de la Guerra del Cenepa y Guerra del 41 contra Ecuador y de la contrainsurgencia contra Sendero Luminoso. El primer pilar del ‘etnocacerismo’ es la reivindicación de la ‘raza cobriza’ (indígena americano), que de acuerdo a su opinión, debe volver a gobernar al Perú, “algo que no sucede desde la llegada de los españoles en el siglo XVI, para lo cual se debe expulsar del país - bajo pena de muerte para quien no lo haga - a todos los que no son ‘cobrizos’ quienes deben ser los únicos habitantes de estas tierras tal como sucedía durante el Imperio Inca”. Venga ya, un racismo soterrado en todo sentido. A modo de excusa pueril para ‘justificar’ tales barbaridades, el patriarca de los Humala agrego “La especie humana tiene cuatro razas, de las cuales la blanca domina el mundo, la amarilla tiene dos potencias, China y Japón, y la negra pese a no estar tan bien como las dos anteriores al menos domina su continente. En cambio, la cobriza está prácticamente apartada y no gobierna en ningún lado. Nosotros pensamos hacer eso, parece algo imposible pero somos utópicos en ese sentido, tenemos esperanza en momentos en que esta ya se ha perdido, eso es lo que nos diferencia” asevero. El segundo pilar del ‘etnocacerismo’ es el nacionalismo irredentista, para lo cual se evoca como símbolo al Mariscal Andrés Avelino Cáceres, quien encabezó la resistencia durante la invasión chilena en la Guerra del Pacífico y nunca se rindió. Por ende, considera a Chile como el mayor enemigo del Perú, así como a España “que destruyo el Imperio Inca, saqueando todas sus riquezas y exterminando a la raza cobriza” afirma el iluminado, convencido de sus palabras. El tercer pilar del ‘etnocacerismo’ es el socialismo:
“Es decir, la teoría política que se basa en la solución de las necesidades básicas de una sociedad, como son la vivienda, la comida, la educación, la salud, el trabajo, el vestido, utilizando para ello la cultura, la ciencia y la tecnología. Por consiguiente el etnocacerismo es el nacionalismo y socialismo aplicado a la realidad de nuestra etnia, la cobriza” expreso. Sobre la base de estos pilares ‘ideológicos’ - por llamarlo de alguna manera- los objetivos políticos del ‘etnocacerismo’ incluyen: La reafirmación de la identidad andina, con la restauración de sus símbolos ancestrales, así como también la conformación de un estado que abarque los antiguos territorios del Imperio Inca (hoy repartidos entre el Perú, Colombia, Argentina, Bolivia y Ecuador); La nacionalización de la industria peruana (empezando por revertir las privatizaciones durante el fujimorismo); La aplicación de la pena de muerte en caso de traición a la patria durante una guerra exterior, establecido por la Constitución de 1979, así como a todos los corruptos; La legalización del cultivo de la coca - la hoja sagrada de los Incas - ‘junto con una lucha implacable contra el narcotráfico’(?); Hacer frente a la amenaza que representa Chile, considerado como el enemigo eterno del Perú, así como iniciar ‘la recuperación’ de Arica y Tarapacá; Convertirse en un país bilingüe obligatorio (español y quechua) tratando de imponer en el transcurso del tiempo como lengua principal a este último; Tener como referencia al gobierno del general Juan Velasco Alvarado, impulsor del Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas en la década de 1970. Como podéis notar, este sancochado que tiene en la cabeza Don Isaac lo ‘heredo’ a sus hijos Antauro y Ollanta, quienes crearon el Movimiento Etnocacerista Peruano, para lograr sus fines. Tras la separación de ambos hermanos, Antauro se convirtió en el único líder de ese grupo marginal. Pero ¿tiene alguna opción para ser Presidente como afirman sus afiebrados seguidores? Ante todo, deberá buscar abandonar la cárcel bajo la modalidad de la libertad condicional, acogiéndose a beneficios penitenciarios. Según explicó su abogada, el líder etnocacerista al cumplir los tres cuartos de su pena por el ‘Andahuaylazo’ tiene derecho a ello, por lo que una vez libre, organizaría a toda su gente con miras hacia el 2021. A la acción judicial se suma la de difusión de sus ideas. Desde hace unos días, el semanario “Antauro” – antes llamado “Ollanta”– ha vuelto a difundirse en algunas zonas de Lima y del interior, principalmente Ayacucho, donde el líder ‘etnocacerista’ tiene gran acogida. En este se anuncian sus próximas movidas así como los planes a futuro en un supuesto gobierno de Antauro. Eso sí, el radicalismo aflora en cada página de esta publicación que nadie sabe cómo se financia. Pero no todo queda ahí, ya que en Facebook se ha creado la cuenta “Antauro Presidente 2021 Perú”, grupo público creado hace unos meses y que tiene entre sus principios la instauración de la pena de muerte y una nueva Constitución, que reemplace a la 1993. Según la información de este grupo, quienes publican cada cierto tiempo sobre lo que esperan de ‘un gobierno etnocacerista’ donde lanzan calificativos muy elevados de tono contra los políticos tradicionales, a quienes cuestionan por estar vinculados a Odebrecht, amenazando con fusilarlos apenas su líder mesiánico llegue a Palacio. Si bien las encuestas lo ubican actualmente en el séptimo lugar de la intención de voto con apenas el 3.5%, podría crecer a medida que se desarrolle la campaña electoral. Según el historiador Hugo Neira, no es tan osado pensar en un escenario electoral con el etnocacerismo presente y con posibilidades. Según consideró, el electorado ya se cansó de los políticos de siempre, y se podría ir hacia una opción radical, pero no de la izquierda actual, ya que sus representantes no tienen el poder de los que ya no están, sino con alguien como Antauro Humala. “Esa izquierda de hoy no tiene a un Javier Diez Canseco, ni un Ricardo Letts en actividad. Entonces, la crisis la tienen ellos. El pueblo está buscando otra figura. En cambio, Antauro tiene, aunque no me guste decirlo, una posible presencia y captar esos votos inconformistas”, sostuvo el intelectual. Como sabéis, el hartazgo de la población con los políticos tradicionales, puede dar origen una vez más a la aparición de un ‘outsider’ que prometa ‘solucionar’ todos sus problemas, el cual no es un fenómeno nuevo en el Perú, debido a la fragilidad de sus instituciones y sobretodo de los partidos políticos, organismos de fachada que solo se reactivan en periodo electoral. En las últimas décadas, muchos de quienes se presentaron como tales al ganar los comicios, se ‘olvidaron’ de sus promesas de ‘campaña’ y se convirtieron en aquellos a los cuales decían ‘combatir’ pero que en el fondo solo querían imitar. Así tenemos por ejemplo a Fujimori, Toledo, Humala y Kuczynski, quienes al final terminaron decepcionando a quienes votaron por ellos. Uno podría pensar que los peruanos aprendieron la lección, pero no, ya están buscando al nuevo ‘antisistema’ cuanto más radical mejor. Allí es donde aparece Antauro, de quien en otras circunstancias, uno podría reírse de sus ‘ofrecimientos’ que son propios de un orate. Pero lamentablemente este es el Perú y como país bananero que es, cualquier cosa puede pasar :(
La familia Coca-Cola recibe a un nuevo miembro, quizás uno de los más esperados. Coca-Cola Sin Azúcar llegó al mercado local con un desembarco a lo grande, para refrescar a todos con una nueva receta y el gran sabor que hizo legendaria a la marca, pero sin azúcar. “Es una bebida nueva que no nace de un día para el otro, sino que es el resultado de un largo proceso de desarrollo e investigación para lograr una receta única”, señaló el Gerente de Relaciones Institucionales de Coca-Cola. Se trata de una fórmula de estreno para una Coca-Cola cuyo envase rojo se diferenciará de la versión Original por una banda negra que bordea la etiqueta con la leyenda “sin azúcares”. El lanzamiento está en línea con la Estrategia de Marca Única de la Compañía, que desde 2016 busca potenciar las variedades bajas y sin calorías de Coca-Cola. “Esta innovación de la Compañía apunta a mantener el sabor de la Coca-Cola Original para que sus consumidores puedan disfrutar de la misma bebida, pero sin azúcar”, explicó. La evolución está en el ADN de esta Compañía, como también liderar los cambios en la industria y adaptar la oferta a los gustos y necesidades de los consumidores en todo el mundo. Este nuevo capítulo en la historia de la Compañía pone fin a la Coca-Cola Zero y le da la bienvenida a Coca-Cola Sin Azúcar, que llega con un nombre que ayudará a los consumidores a identificarla rápidamente como lo que es: una bebida sin azúcar. La idea es ambiciosa: hacer historia. Sí, porque impulsar un cambio de hábitos, reformular y promover la reducción en el consumo de azúcar son acciones que llegaron para quedarse. Desde su nacimiento, hace ya 131 años, Coca-Cola planifica el futuro pero siempre atenta a lo que ocurre en el presente. Tan similar es el sabor de Coca-Cola Sin Azúcar a la Original, que la Compañía diseñó un robot bautizado M.A.R.T.A (Modelo Avanzado Robótico de Testeo Automático), ‘único en la Tierra’ aseguran sus creadores, capaz de determinar la casi imperceptible diferencia entre ambas versiones. El robot apunta a desafiar a los consumidores a encontrar la diferencia entre ambas bebidas. Y ése es el centro de esta invitación para descubrir su verdadero sabor :)
A través del uso de drones, un grupo de arqueólogos han descubierto más de 50 nuevos geoglifos en la provincia de Palpa (Ica). Se trata de trazados sobre la superficie de la tierra en "líneas casi demasiado finas para verse con el ojo humano", precisa un artículo publicado por la National Geographic. De acuerdo con esta investigación, algunas de las líneas recién descubiertas pertenecen a la cultura Nazca, que dominó el área desde el año 200 hasta el 700 d C. Sin embargo, los arqueólogos sospechan que las culturas anteriores de Paracas y Topará tallaron muchas de las imágenes recién descubiertas entre 500 a. C. y 200 d.C. A diferencia de las icónicas líneas de Nazca, los antiguos glifos de Paracas fueron trazados en las laderas. Además, mientras las líneas de Nazca a menudo consisten en líneas o polígonos, muchas de las nuevas figuras de Paracas representan a los humanos. "La mayoría de estas figuras son guerreros", declaró a National Geographic el arqueólogo Luís Castillo Butters , co-descubridor de los nuevos glifos. "Estos podían ser vistos desde cierta distancia, por lo que la gente los había visto, pero con el tiempo, fueron completamente borrados". De acuerdo con la publicación, "los nuevos geoglifos añaden datos relevantes sobre la cultura Paracas, así como la misteriosa cultura Topará, que marcó la transición entre los Paracas y los Nazca. Siglos antes de que se hicieran las famosas líneas de Nazca, la gente en la región estaba experimentando con la fabricación de geoglifos masivos" aseveró Butters. Por su parte, el arqueólogo del Ministerio de Cultura, Johny Isla, jefe restaurador y protector de las Líneas de Nazca, dijo que "esto significa que es una tradición de más de mil años que precede a los famosos geoglifos de la cultura Nazca, lo que abre la puerta a nuevas hipótesis sobre su función y significado". Agregaron que, irónicamente, el descubrimiento de los nuevos geoglifos solo fue posible debido a las amenazas que se ciernen sobre las famosas líneas de Nazca. Pero ¿cómo fueron identificados? El primer proyecto de la plataforma GlobalXplorer invitó a voluntarios a mirar fotos satelitales de Perú. Una vez que los voluntarios de GlobalXplorer marcaron objetivos potenciales en los datos satelitales que podrían ser posibles sitios arqueológicos o casos de saqueo, la arqueóloga y fundadora de GlobalXplorer, Sarah Parcak, entregó las ubicaciones objetivo a los arqueólogos peruanos. Con el apoyo de la Iniciativa de Preservación Sostenible, el arqueólogo y profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), Jaime Castillo, y tres de sus estudiantes se embarcaron en una expedición de verificación en el terreno financiada por la National Geographic Society. Aunque en un primero momento no hallaron mucha evidencia de nuevos saqueos en los objetivos de GlobalXplorer, cuando fotografiaron los sitios desde una altura considerable con drones, encontraron algo nuevo e inesperado. Las imágenes de alta resolución contenían indicios de docenas de geoglifos antiguos, tallados en la corteza del desierto. "Con el tiempo, muchas de las líneas y figuras se han reducido a débiles depresiones en el suelo, visibles solo en escaneos tridimensionales del terreno capturados por la perspectiva del ojo de águila proporcionada por los drones. Y a pesar del imponente poder de vigilancia de los satélites, no pueden ver todo", menciona el artículo. Las líneas que trazan los geoglifos recién descubiertos son de apenas unos centímetros, demasiado finas para ser detectadas desde el espacio. Tras el hallazgo de estas nuevas líneas, los arqueólogos peruanos están interesados en protegerlas. Los nuevos geoglifos están dentro del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco que abarca las líneas de Nazca y Palpa, y según Isla, no están bajo amenaza inmediata. Sin embargo, las líneas recién descubiertas aún no se han registrado en el Ministerio de Cultura del Perú. El codescubridor de las líneas, Fabrizio Serván, un estudiante de la PUCP, dice que actualmente se están redactando los mapas y dibujos necesarios para ello :)