A un mes de las elecciones en el Perú, es innegable que una ola in crescendo recorre el país andino, donde un carismático personaje y exitoso empresario, bautizado coloquialmente por los peruanos como Porky (por su gran parecido al conocido cerdito de las antiguas caricaturas de la Warner) se ha convertido en uno de los favoritos para ganar las elecciones presidenciales a realizarse el 11 de abril. En efecto, según las ultimas encuestas dadas a conocer esta semana, todo parece indicar que el ultraconservador candidato de Renovación Popular, Rafael López Aliaga (a quien nos estamos refiriendo) y el populista de izquierda Yhony Lescano serán quienes definirán en segunda vuelta al ganador de los comicios, donde es justo reconocer que a estas alturas todavía existe un alto porcentaje de peruanos indecisos, quienes habitualmente se inclinan al final por aquellos que van punteros en las encuestas: “Según las tendencias actuales, los que pasarían a segunda vuelta serían López Aliaga y Lescano. Ambos siguen escalando en los sondeos de opinión y tienen espacio para seguir trepando, mientras sus más cercanas competidoras, Keiko Fujimori y Verónika Mendoza, permanecen estancadas a la vez que George Forsyth se encuentra en caída libre”, dice Hernán Chaparro, catedrático e investigador de la Universidad de Lima. Lo que ha llamado la atención es la presencia en estas elecciones de una veintena de aspirantes, lo cual ha elevado la incertidumbre que desde el año pasado viven los peruanos en medio de una profunda crisis política, económica y sanitaria por el Coronavirus, que se ha agravado por las desastrosas decisiones tomadas tanto por el delincuente Martín Vizcarra - ignominiosamente destituido por el Congreso acusado de múltiples delitos de corrupción - como por Francisco Sagasti, un conocido admirador de terroristas y cuyas reales intenciones es mediante el fraude en los comicios (para lo cual controlan el organismo electoral) instaurar el comunismo en el Perú. Cabe destacar que la indecisión de los electores todavía se refleja en todos los sondeos, donde un 37% de peruanos afirma que no sabe por quien votar, número muy por encima de cualquier postulante. Para agravar la situación, entre quienes disputan el primer lugar de las encuestas se encuentra un demagogo de cuidado, con oscuros lazos con Odebrecht y conspicuo acosador de mujeres. Su nombre, Yonhy Lescano, quien arrasa en el sur del país - habitualmente un bastión de la izquierda - desbancando a la comunista Mendoza. Como contendor tiene a López Aliaga, cuya presencia es muy fuerte en Lima (el principal bolsón electoral del país) y cuya acelerada subida ha sorprendido a muchos analistas, ya que hasta hace pocos meses era un completo desconocido en la política. Sin embargo, la presencia de una serie de aspirantes que saben muy bien que no van a ganar dispersaran los votos, evitando que haya un vencedor en primera vuelta y se vaya al ballotage en junio para recién definir al ganador. "A la luz de la cantidad de minicandidatos que hay hasta la última semana no sabremos si alguien logrará imponerse el 11 de abril, pero sí sabemos que el país estará más polarizado y fragmentado que nunca", dijo al respecto la analista Sonia Goldenberg. El respaldo a Lescano, que fue legislador durante 18 años viviendo groseramente del Estado, ha crecido desde febrero con una plataforma económica de izquierda y la promesa de hacer absurdos cambios constitucionales para restar derechos a la clave industria minera. Pero quien ha subido como la espuma es López Aliaga (infatigable defensor de la vida, la familia y la propiedad) cuyo espectacular avance en las últimas semanas ha desconcertado a muchos a tal punto que hay quienes consideran que será quien acceda a Palacio el próximo 28 de julio, lo que ha generado terror entre los parásitos comunistas que hoy (des)gobiernan el país, que lo ven como una especie de Bolsonaro andino, lo cual como podéis imaginar, les ha helado la sangre, dando origen en la prensa prostituida al servicio del régimen golpista, de una infame campaña mediática en contra del popular Porky, temerosos además luego de conocer su promesa de quitarles la “mermelada” a todos aquellos medios - pertenecientes a los grupos El Comercio, La República y RPP - que están en la quiebra y que sobreviven únicamente a costa del Estado. No es de extrañar por ello que esa prensa basura ataque con alevosía y ventaja las 24 horas del día a López Aliaga, porque tienen mucho que perder si gana los comicios. Por cierto, más atrás en las encuestas y fuera de los cinco aspirantes ya mencionados, en el rubro de “otros” aparece el candidato oficialista (un vago mantenido por su mujer) con apenas el 1% lo que indica que su agrupación no pasara la valla electoral. No hay duda alguna que la existencia de esa serie de “partidos” como el citado anteriormente (agrupaciones fantasmales sin bases ni programas y que solo aparecen en épocas electorales) es un fiel reflejo de la precariedad en que vive el país desde hace décadas, que se inicio con la sorpresiva llegada al poder en 1990 de un outsider llamado Kenyo Fujimori, quien desde el primer momento se dedico a atacar a “los partidos tradicionales” acusándolos de la terrible situación que vivía el Perú por el terrorismo y luego protagonizó un autogolpe de Estado en 1992, instaurando una sangrienta dictadura que duro hasta su vergonzosa huida del país en el año 2000. Desde entonces, surgieron otros outsiders como Toledo, Humala o Kuczynski quienes se sucedieron en el poder, desengañando a todos por estar comprometidos en escandalosos casos de corrupción, por lo que el descrédito de la clase política peruana en su conjunto ha sido total. En el caso de Alan García, este demagogo pudo regresar al poder con el APRA en el 2006 únicamente luego que sus delitos de su caótico primer gobierno quedaran prescritos, pero termino de hundir definitivamente a su agrupación con los nuevos escándalos en los que se vio envuelto y que origino su suicidio al estar rodeado por la policía en su guarida cuando se disponía a detenerlo. Con su muerte, mando literalmente al infierno al APRA que por cierto, ya agonizaba irremediablemente y que desapareció con el, posibilitando que no existan actualmente en el país partidos políticos como tales, sino únicamente grupetes con oscuros intereses económicos que se diferencian únicamente por sus siglas, ya que en el fondo solo intentan hacerse con el poder para copar el Estado y vivir a costa de el. Para algunos desinformados que afirman que Acción Popular es la excepción, cabe destacar que se trata de una agrupación en estado terminal que se arrastra lastimosamente desde hace décadas en medio de la ignominia y que si bien ahora su candidato es Lescano, este se encuentra en las antípodas del fundador del partido Fernando Belaúnde y como buen demagogo que es, ha dejado en claro que en una eventual segunda vuelta se aliaria con quien sea, incluso con los comunistas a los que coquetea con sus disparatadas propuestas estatistas que tanto daño han hecho al Perú, por lo que muchos analistas han afirmado que si Belaúnde saldría de su tumba y viera lo que esta haciendo ese sujeto oportunista con su vieja agrupación, se vuelve a morir, pero del disgusto. Pero la sorpresiva aparición en escena de Renovación Popular para acabar con ese clientelaje político, ha sido como una brisa fresca en medio de ese páramo y el apoyo creciente que obtiene cada día su candidato López Aliaga confirma que los peruanos saben que con el llegará el cambio tan anhelado. Si bien en Perú el Congreso es elegido a una sola vuelta, la reñida campaña presidencial prefigura que ningún partido tendrá mayoría, por lo que el parlamento seguirá fragmentado como ahora. Precisamente debido a ese detalle, el país ha estado sumido en constantes choques entre el Ejecutivo y el Legislativo desde que en el 2016 el conocido lobbysta y Traidor a la Patria Pedro Pablo Kuczynski ganase la presidencia por 50.000 votos a Keiko Fujimori, quien nunca reconoció su derrota alegando “fraude” y desde el primer momento conspiro contra el. De esta forma su agrupación caudillista - llamada Fuerza Popular - entonces mayoritario en ese Congreso, le declaró una guerra sin cuartel hasta forzar su renuncia en el 2018, en medio del escándalo de la constructora brasileña Odebrecht, siendo reemplazado por un miserable traidor como Martín Vizcarra quien se alío con el fujimorismo para desbancar a su jefe, pero una vez en Palacio, disolvió el Congreso y se erigió en dictador. Creyendo el muy infeliz que el nuevo parlamento a ser elegido iba a ser dominado por el para intentar eternizarse en el cargo, este lo destituyo por corrupto y por ladrón, siendo reemplazado brevemente por el presidente del Congreso Manuel Merino, quien se vio obligado a renunciar a los cinco días luego de violentas protestas organizadas por el vizcarrismo en confabulación con MOVADEF (organismo de fachada de Sendero Luminoso), creyendo que esta acción lo devolvería al cargo, pero ello no ocurrió y quien fue elegido bajo presión de la calle fue un admirador de terroristas como Francisco Sagasti, quien debería estar en el cargo hasta el 28 de julio, cuando sea reemplazado por quien gane las elecciones del 11 de abril, pero se sospecha que intentará que su candidato - aquel vago y mantenido que le pone los cuernos a su mujer y del cual no quiero decir su nombre - sea el “elegido” de cualquier manera, a pesar de que figura con apenas el 1% en los sondeos. "Si bien existe un gran rechazo a los políticos por estar asociados con la corrupción, Lescano buscara beneficiarse con su imagen de provinciano para diferenciarse de las elites capitalinas y sobretodo de su contendor López Aliaga, quien enfatiza su pertenencia a la organización católica Opus Dei” acota Goldenberg. De otro lado, aunque las sucias, bulliciosas y caóticas calles de Lima y otras ciudades están cubiertas de propaganda electoral, y la televisión transmite diariamente los avisos de los candidatos, el entusiasmo preelectoral usual es apenas palpable. “El pobre ritmo de la campaña es marcado por las restricciones de movimiento que impone la pandemia y la recesión económica - el PIB cayó 11,12% en 2020, el peor desempeño en 30 años - provocada por el desastre del vizcarrismo y de quienes hoy lo suceden, que básicamente son los mismos” agregó. “El país está bajo toques de queda nocturnos y las manifestaciones están prohibidas para mitigar los contagios, por lo que las redes sociales se han convertido en el escenario natural de campaña, con abundancia de memes, pero con una escasez de propuestas en un país donde suele importar menos la ideología y más la personalidad del candidato” enfatizó. “De los restantes candidatos, poco se puede decir, Forsyth era el favorito del vizcarrismo - a pesar de que fue un desastre como alcalde de un barrio populoso que sigue siendo el mas horrible y peligroso de Lima - pero con la caída del lagarto, perdió todo apoyo y se ha ido cuesta abajo, a pesar que durante meses estuvo puntero; En el caso de Keiko Fujimori, representa el pasado autoritario de su padre - condenado en un proceso ejemplar a 25 años de prisión por Crímenes de Lesa Humanidad - por lo que el antivoto contra ella es muy fuerte y perdería con cualquiera, en caso logre pasar al ballotage. Es mas, la reciente acusación fiscal para ser condenada a 30 años de prisión y la prohibición de su agrupación Fuerza Popular al ser considerada una agrupación criminal, dejaría a sus votantes en el aire, quienes de seguro se irían en masa a votar por López Aliaga; Finalmente esta Verónika Mendoza, quien busca implantar el comunismo en el Perú a pesar de que este ha fracasado rotundamente en otras latitudes, deseando imitar de una forma suicida a países como Cuba y Venezuela que se debaten en medio de una crisis sin final. Con su demencial deseo de reeditar el velasquismo que destrozó al país andino en la década de los 70, cambiar la actual Constitución neoliberal para reemplazarla con una de tinte estatista e indultar a Abimael Guzmán (cabecilla del grupo terrorista Sendero Luminoso, condenado a Cadena Perpetua), se pinta ella misma como un peligro absoluto para la estabilidad del país, y es increíble por ese motivo que pueda tener algún apoyo” puntualizó Goldenberg. No cabe duda que a medida que se acerque la fecha de los comicios, los peruanos deberán reflexionar muy bien para evitar que esa banda de indeseables que están en el gobierno y sus aliados se salgan con la suya. Es imprescindible por ello apoyar a toda costa a López Aliaga para acabar con esa maldita peste comunista de una vez por todas. El Perú te lo agradecerá. Venga tío Porky, a ganarle a la corrupción en primera vuelta... A por ellos (Por cierto, al momento de escribir esta nota, me entero que el Ministerio Público solicitó al Poder Judicial una orden de 18 meses de prisión preventiva para ese lagarto de Martín Vizcarra, por los millonarios sobornos recibidos siendo gobernador regional de Moquegua de parte de empresas del Club de la Construcción, y que fue el detonante para que el Congreso lo vacara en noviembre del 2020. Esperemos que la semana que viene, ese vil sujeto ya se encuentre tras las rejas, donde debe de estar) :)
Luego de más de 100 años de historia, Cusqueña vuelve a sorprender al mercado logrando una cerveza imposible. Se trata de Cusqueña Doble Malta, resultado de la combinación de dos maltas premium: Pilsner y Munich que permiten una variedad única de gran sabor y calidad superior. “Cusqueña Doble Malta es el resultado de un arduo proceso de innovación que nos permitió lograr el balance perfecto de sabor. Estamos orgullosos de traer al mercado esta nueva Cerveza Premium de excelente calidad para disfrutar en cualquier momento”, comenta Diego Devoto, Director de Marketing de Premium Brands en Backus. Cusqueña es la primera cerveza premium peruana en lograr combinar estas dos maltas. La Pilsner aporta cuerpo, sabor y frescura, mientras que la Munich un aroma intenso y notas dulces. Esta nueva cerveza de color dorado intenso hace un maridaje perfecto con sabores intensos y platos cremosos con un manejo medio de los picantes. De esta manera, Doble Malta que se integra a la familia Cusqueña y ya se encuentra disponible en los formatos: botella 330ml, 620ml y lata 269ml que puedes encontrar en todos los supermercados, bodegas y canales de e-commerce a nivel nacional. Cabe mencionar que la marca busca acercar a sus consumidores sabores y experiencias para disfrutar en casa. Así, recientemente lanzó una alianza con Rappi que tiene como principal finalidad contribuir con los negocios gastronómicos, a través de la subvención del 30% del valor de los combos de la iniciativa, más la inclusión de 10.000 botellas de Cusqueña para lograr toda una experiencia de maridaje. Estas 10.000 Cusqueña son entregadas de cortesía a los restaurantes para que puedan tener mayores ingresos. Esta alianza permite llevar la especialidad de cada restaurante a la casa de los consumidores, contribuir con la reactivación del sector gastronómico y, además, brindar soluciones prácticas para seguir respetando las medidas de prevención de cara a la crisis sanitaria que agobia al país. Cusqueña, la cerveza peruana que el mundo prefiere :)
