EL VENADO DE LOS ANDES: Su supervivencia no esta garantizada
Se trata de un mamífero perteneciente a la familia Cervidae, que habita tanto en la Cordillera de los Andes como en algunas partes de la Amazonia y que se encuentra en peligro de extinción. Conocida en el Perú como ‘Taruca’ tiene el nombre científico de ‘Hippocamelus antisensis’ que significa "caballo-camello", porque al describirlo por primera vez se dudaba de su ubicación taxonómica. Este ungulado posee sus pezuñas perfectamente adaptadas para la marcha en terrenos ríspidos, pedregosos y anfractuosos, su tronco y cabeza son relativamente gruesos en comparación con sus patas, la altura de los ejemplares adultos al nivel de la cruz o alto del dorso es de entre 70 a 80 cm. siendo más corpulentos los machos. Poseen astas de hasta 30 cm. de longitud que concluyen en una bifurcación (en forma de V). Si bien tiene las orejas largas, su cola por el contrario es bastante corta. Su pelaje externo es áspero, denso con colores que varían del grisáceo al rojizo pasando por el castaño (según la época del año), en su zona ventral poseen un color blanquecino mientras que sobre el rostro y hocico, los machos presentan una mancha negra en forma de Y. El peso de los ejemplares adultos oscila entre los 50 y 75 Kg., siendo mayor el peso de los machos al ser mayor su corpulencia. Este ciervo se caracteriza por vivir aproximadamente entre los 1.800 y 5.500 msnm. Pasta en grupos familiares de hasta quince individuos, liderados por una hembra. Es un animal diurno, muy tímido y arisco, que ante la presencia humana o alguna señal de peligro, no duda en emprender velozmente la huida. Vive en estado silvestre alrededor de 10 años. Lamentablemente, la caza desmedida y los cambios operados en su hábitat han tornado muy escasa esta especie, al punto de haber sido catalogada en peligro de extinción a nivel internacional. La población total de la especie se ha estimado entre 12000 y 17000 individuos. La mayor parte se encuentran en el Perú con un estimado de entre 9000 a 13,000 ejemplares. En Chile habitarían unas 1000 y algo más de 2000 en Argentina y Bolivia. Conocida desde tiempos anteriores a los Incas, fueron los nazca quienes usaron la piel curtida del ciervo para confeccionar hondas o boleadoras para arrojar piedras, utilizándolas en las guerras de conquista que sostenían con otros pueblos. Para las fiestas ceremoniales en sus templos, los sacerdotes acostumbran iniciar sus ritos colocándose a manera de mitra, las cabezas y pieles del venado. Se decía que si alguien tenía hijos gemelos era una señal de mal agüero, y como medio de purificación se degollaba un ciervo, cuya piel se dejaba secar para luego ser colocada a manera de techo, por donde cruzaban las supuestas almas en pena, para conjurar el mal augurio. Otra práctica común entre los nazca fue la de colocar a sus hijos pequeños sobre las pieles curtidas de este venado para que adopten su velocidad y aprendan a caminar más rápido. Como era de esperar, también aprovecharon la carne de este mamífero la cual era disecada y almacenada en depósitos para ser consumida en sus fiestas y ceremonias religiosas. Asimismo, en su cerámica que se conserva en los museos, se puede observar variadas representaciones pintadas en forma naturalista y también modeladas adoptando la forma de este cérvido. Ello da a entender que por aquellas épocas, eran muy abundantes y antiguas crónicas dan cuenta de que existían manadas de hasta 6 mil ejemplares en la costa peruana, donde se ubicaba precisamente el reino Nazca. Actualmente sus poblaciones son muy escasas, estando en vías de extinción en el Perú, según el Decreto Supremo 013 - 99 - AG, del Instituto Nacional de Recursos Naturales - INRENA. El Venado de los Andes está protegido en los Parque Nacionales Río Abiseo en San Martín, Huascarán en Ancash, Manu en Madre de Dios; en las Reservas Nacionales Pampas Galeras en Ayacucho y Salinas - Aguada Blanca en Arequipa y Moquegua. Salvémosla, antes que sea demasiado tarde :(