Esta es la historia de un icono que se volvió un genérico que se ha convertido en imprescindible incluso en los hogares. Como recordareis, en un capítulo de la serie Boardwalk Empire, producida por Martin Scorsese y adaptada a la televisión por el escritor de Los Soprano, el gánster italiano Gyp Rosetti se vara en la mitad del camino porque las ruedas de su carro están oxidadas. Ninguno de sus matones sabe qué hacer para reparar el daño, hasta que llega un lugareño y le dice que use “3 en 1”. Rosetti, desconcertado, le pregunta al desconocido bonachón a qué se refiere con eso. El interlocutor, aun más desconcertado, le responde con naturalidad que está hablando del aceite 3 en 1. El gánster le dice que no es tan obvio, que “3 en 1” podría ser incluso una pinza; el otro le responde que de ninguna manera. Se despiden, y cuando el desconocido se da media vuelta, Rosetti lo mata con una varilla. Luego de 124 años de historia y con una presencia en más de 60 países, Rosetti debería haber sabido qué es el aceite 3 en 1. Fundado en 1894, contemporáneo de la aspirina, el betún y la Coca Cola, este producto fue creado en los EE.UU. para limpiar, lubricar y proteger. De ahí, el nombre. Empezó con un envase de época en vidrio, con un corcho en la boquilla, pero la dosificación se dificultaba. Luego, llegó la presentación en hojalata, pero se oxidaba. Finalmente, se diseñó el tarro plástico, que sobrevive hasta hoy. Posteriormente, se lanzó una versión en aerosol. Producida originalmente por Home Products, este a su vez fue adquirido por Colgate Palmolive. Entonces, 3 en 1 pasó a manos de Reckitt & Colman (hoy, Reckitt Benckiser), para finalmente, en 1996, quedarse en manos de WD-40, también estadounidense. “Lo que buscó aceite 3 en 1 desde el principio fue mejorar la calidad de vida de las personas disminuyendo el ruido que se genera por las actividades cotidianas. El más común de todos: abrir y cerrar una puerta” dijo el representante de 3 en 1 en el Perú. Hoy, su utilidad en los hogares es tan evidente y es algo que no se puede negar, circulando aproximadamente 18 millones de frascos en el mundo. El principal problema al que se enfrentan son las falsificaciones o competencia desleal, que le quita a 3 en 1 cerca de 20% de las ventas. Además, en mercados como EE.UU. se ha venido presentando un consumo decreciente - algo que no se da en el resto del mundo - a causa de otros productos en aerosol llamados Cleaner. Aun así, 3 en 1 se ha vuelto tan conocido que ni siquiera necesita publicidad. Sin embargo, el reto será la recordación de marca en las nuevas generaciones. “Cuando un producto tiene un costo tan bajo y es tan necesario, se vuelve de impulso, es decir, la gente lo compra porque lo ve”. A pesar de todo, no se descartan estrategias publicitarias a mediano plazo. La idea es que la ‘gota del silencio’ siga sumando años a los 124 que tiene permitiendo que la gente pueda llegar tarde a la casa sin que nadie se dé cuenta :)