Considerada la competencia más antigua del mundo, hoy se encuentra en franca decadencia por culpa de sus ambiciosos organizadores que en busca de sacar mayor provecho de ella, han decidido en los últimos tiempos realizarla prácticamente todos los años, por lo que ha perdido interés, además de invitar a participar a países tan lejanos geográficamente como Australia, Japón o Qatar. Incluso em una ocasión quisieron invitar a España, a lo que me pregunte "¿Que pintamos alli?". Al ser - nominalmente - un torneo americano, deberían estar representados todos los países del continente desde Canadá hasta las islas de las Antillas, pero no ocurre nada de ello. Quizás como en el Caribe los países son numerosos, se podría hacer como en la Eurocopa, una ronda clasificatoria entre todos los participantes y quienes la ganen, obtienen el derecho a asistir. Seria lo más justo, pero no para los organizadores, quienes consideran que no seria atractivo ni futbolística ni económicamente que participen países que no aportan nada a un torneo venido a menos. A modo de excusa, afirman que ellos tienen el suyo propio, denominado la “Copa de Oro” por lo que no les interesa participar en otra competencia. Si bien es cierto que aparte de EE.UU., Méjico y tal vez Canadá, el resto es relleno, aun así se debería hacer un esfuerzo para que la Copa América haga honor a su nombre ¿no os parece? Sin embargo y para su desdicha, “gracias” al Conoravirus el torneo - que debía haberse realizado el 2020 conjuntamente en Argentina y Colombia, fue pospuesto para que se inicie el 11 de junio de este año con la esperanza que la situación sanitaria mejoraría, pero no ha sido así, ya la pandemia ha recrudecido en tal forma que el número de muertos e infectados crece sin cesar, a tal punto que el presidente argentino ha deslizado la posibilidad de no organizarla, dejando la tarea enteramente a Colombia, que si bien ha manifestado que esta en capacidad de hacerlo por su cuenta, la pandemia arrecia en el país y han surgido voces exigiendo que no se realice el torneo futbolístico, aunque el gobierno de Duque a reiterado que se hará “si o si” no importándole que se multipliquen los contagios. A ello debemos agregar las protestas sociales que arrecian en Colombia, por el rechazo generalizado a los planes del gobierno de aumentar los impuestos mediante una reforma tributaria, a pesar de que en su campaña electoral Duque prometía lo contrario. Incluso hay muertos en las calles por las multitudinarias marchas contrarias a la reforma, por lo que se prevé que la Copa América ocupa para los colombianos el último lugar entre sus prioridades. No nos debería sorprender si a final, no se realiza el torneo. Además al persistir la pandemia, los estadios lucirán vacíos, desluciendo el espectáculo. Vapuleada por todos, la Copa América subsiste de sus recuerdos “gracias” a la Conmebol que solo ve el aspecto monetario sin importarle lo demás. Algo que deben entender sus dirigentes es que no porque se hagan más ediciones se va a mejorar. No puede concebirse que en algo así de diez años se hayan realizado cinco torneos. Si creen que así van a ganar mas dinero, en realidad terminaran matándolo. Y el prestigio que alguna vez tuvo, nunca volverá :(